Air France-KLM firmará durante los próximos días la adquisición del 25% de la nueva Alitalia, ahora controlada por el consorcio CAI, lo que supondrá para el grupo franco-holandés un desembolso de unos 310 millones de euros.
Según el rotativo 'Milano Finanza', Air France-KLM pagará unos 270 millones de euros en concepto de las acciones y un "premio" de 40 millones de euros. De esta forma, la nueva Alitalia se valoraría en 1.200 millones de euros, 150 millones de euros más que los pagados por CAI por la compañía.
La decisión habría sido alcanzada después de una "larga" 'conference call' entre el presidente de CAI, Roberto Colaninno, y el presidente de Air France-KLM, Jean Cyril Spinetta, y debería hacerse oficial en los próximos días. Esto, según 'La Repubblica' habría provocado la anulación del encuentro previsto entre Alitalia y Lufthansa.
No obstante, fuentes cercanas a la negociación citadas por 'Radiocor' aseguraron que las negociaciones "están todavía abiertas". "No se ha firmado nada y en los primeros días de la próxima semana podría producirse un encuentro entre la dirección de Alitalia y la de Lufthansa", recalcaron dichas fuentes, quienes puntualizaron que con Air France "sigue habiendo negociaciones de tipo técnico".
Más cercana que Lufthansa
Pese a los últimos intentos de Lufthansa, fuentes cercanas a la negociación citadas por 'La Repubblica' apuntaron que Alitalia habría optado por Air France-KLM teniendo en cuenta que la red de rutas es "más compatible", que ambas compañías "se conocen desde hace años", pero sobre todo por que si la aerolínea italiana abandonara SkyTeam --de la que forma parte junto con Air France-- para unirse a Star Alliance, alianza liderada por Lufthansa, "debería pagar una multa superior a los 200 millones de euros".
Así, en el caso de que finalmente Air France-KLM entrara en el accionariado de Alitalia, la nueva compañía aérea contaría con una "sólida base" de vuelos de largo radio en el aeropuerto de Roma-Fiumicino, un "cordón umbilical" entre Milán-Malpensa y París-Charles de Gaulles, y una fuerte red de rutas domésticas gracias a la adquisición de AirOne.
Además, Air France entraría en Alitalia con una situación notablemente mejor que la de hace un año y medio, cuando el grupo franco-holandés presentó su oferta para hacerse con el control de la aerolínea de bandera italiana. La compañía italiana tiene ahora un 30% menos de vuelos, costes inferiores, una flota "más racional y moderna" y perspectivas de entrar en beneficios dentro de un par de años.
Air France-KLM, con una inversión de "sólo" 300 millones de euros, se convertiría así en el primer accionista de una compañía "mucho más ligera, sin competidores en el mercado doméstico, con contratos ya negociados con los sindicatos y un solo hub".
Asimismo, el grupo franco-holandés pagaría un precio muy inferior en comparación al que ofreció en la pasada primavera, cuando presentó una oferta en la que se comprometía a hacerse cargo de 1.400 millones de euros de deuda y a comprar el 85% del capital en obligaciones por valor de 600 millones de euros.
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