El 1 de enero de 2001, los propietarios del hotel que Barceló gestionaba en Shanghai han decidido de forma unilateral rescindir el contrato de gestión que les unía con la cadena hotelera española sin ofrecer ningún tipo de explicación lógica ni satisfactoria y sin fundamento jurídico ni legal alguno, informó Barceló en un comunicado de prensa dado a conocer este miércoles.
La flagrante violación del contrato firmado por parte de los propietarios, agrega la nota de prensa, obligará a Barceló a poner en marcha los procedimientos de indemnización previstos en dicho contrato para el resarcimiento de los posibles perjuicios ocasionados a la empresa mallorquina.
Se da la circunstancia que en tan solo 16 meses de vida, dicho establecimiento ha tenido tres gestores, siendo Barceló el que más tiempo ha permanecido en el mismo por espacio de ocho meses.
Cuando Barceló se hizo cargo de la gestión en mayo de 2000, continúa la información, el hotel tenía un déficit operativo de menos 520.000 dólares, sin incluir los tres millones de dólares que el gesto anterior había dispuesto para la puesta en marcha del hotel. En fecha 30 de noviembre de 2000, Barceló, en tan solo seis meses, había conseguido un beneficio operativo de 1.200.000 dólares.
En dicho período de tiempo, "la gestora tuvo que organizar toda la estructura de personal del hotel, establecer todos los procedimientos de operación e iniciar desde los niveles más básicos toda la formación del personal local".
Barceló Hotels, que mantendrá abierta en Shanghai su oficina de representación, confía "en conseguir recuperar pronto su presencia en el mercado hotelero chino, así como desarrollar su expansión en otros países de la región Asia Pacífico", afirma por último la nota informativa.
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