El número de viajeros alojados en los establecimientos hoteleros del País Vasco alcanzó las 81.255 personas durante el pasado mes de enero, lo que se tradujo en un descenso del 2 por ciento respecto al mismo mes del 2000. Si se compara con los dos años precedentes, el alza se sitúa en el 6,7 por ciento.
Las pernoctaciones, sin embargo, mejoraron sus resultados respecto al ejercicio anterior, al incrementarse en un 1 por ciento, según fuentes oficiales a las que tuvo acceso Europa Press. En contra de lo que sucedió en meses anteriores, la mayor reducción de entradas tuvo lugar en Alava (-5,0 por ciento), registrando en Bizkaia una bajada más moderada (-1,0 por ciento) y quedando prácticamente estables los datos de Gipuzkoa. Siguiendo la tendencia de meses anteriores, desciende el número de viajeros de procedencia estatal (-3,0 por ciento) y aumenta la afluencia de visitantes extranjeros (+2,0 por ciento). Disminuyen las entradas de viajeros procedentes del extranjero (+2,0 por ciento). Disminuyeron por su parte las entradas de viajeros procedentes de Cataluña, Madrid, Comunidad Valenciana y Andalucía. Aumentaron, en cambio, los que vienen de Galicia, Asturias, Cantabria, Castilla y León y los viajeros del País Vasco. Entre los extranjeros suben los alemanes, franceses, portugueses, holandeses y belgas, así como los provenientes de USA, Canadá, Iberoamérica y Japón. Las pernoctaciones mejoraron los resultados de enero del año anterior en un 1 por ciento, pasando de 143.631 de enero del 2000, a 145.571 del mes pasado. Este incremento ha compensado el efecto negativo de menos visitantes, gracias al aumento registrado en la duración de la estancia media de los viajeros alojados en los hoteles, que era de 1,74 días en enero del pasado año y se eleva a 1,79 en éste. Son los viajeros extranjeros los que obtienen un notable crecimiento de las pernoctaciones (+15,0 por ciento). En Gipuzcoa, al contrario de lo que ocurre en otros territorios, aumentan los viajeros de origen estatal (+4 por ciento) y bajan los turistas extranjeros (-16 por ciento). El grado de ocupación por habitaciones bajó un 2 por ciento. Este índice mejora casi un punto en los establecimientos hoteleros de las capitales, pero pierde entre cuatro y cinco puntos en los del litoral e interior.
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