Si Iberia no sale a Bolsa en la fecha prevista por el nuevo conflicto desatado por los pilotos "volvería a decepcionar al mercado y la imagen de la compañía ante los accionistas se vería deteriorada, aunque seguiría muy bien valorada", según analistas consultados por Europa Press.
Si Iberia no sale a Bolsa en la fecha prevista por el nuevo conflicto desatado por los pilotos "volvería a decepcionar al mercado y la imagen de la compañía ante los accionistas se vería deteriorada, aunque seguiría muy bien valorada", según analistas consultados por Europa Press. En este sentido, el experto de Benito y Monjardín, Javier Requena destacó que los grandes perjudicados por esta suspensión "serían los pilotos", ya que también son accionistas de la compañía, por lo que expresó su confianza en que finalmente se solucione el conflicto. En su opinión, si finalmente se suspende la oferta pública de venta (OPV), "Iberia se habría gastado para nada millones en publicidad que afectarían a su cuenta de resultados". Otros expertos consultados por Europa Press resaltaron que si la OPV se suspendiese se vería perjudicada la imagen de la compañía, aunque esta seguirá siendo "positiva" ya que el plan de creación de valor está funcionando. También coincidieron en que "los principales afectados serían los pilotos porque forman parte del accionariado". En su opinión, "es muy difícil que se pueda realizar la OPV si no se firma antes el convenio entre los pilotos y la dirección".
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