El portavoz del gobierno español, Pío Cabanillas, explicó ayer en una rueda de prensa ofrecida tras la reunión semanal del Consejo de Ministros, que sin la aplicación del Plan Director de la SEPI, destinado a normalizar la situación de Aerolíneas Argentinas (AA), "poco se puede pensar en el futuro de la empresa".
El portavoz del gobierno español, Pío Cabanillas, explicó ayer en una rueda de prensa ofrecida tras la reunión semanal del Consejo de Ministros, que sin la aplicación del Plan Director de la SEPI, destinado a normalizar la situación de Aerolíneas Argentinas (AA), "poco se puede pensar en el futuro de la empresa". "Cuando se está ante una empresa con unas pérdidas de alrededor de 58.863 millones de pesetas (353,77 euros/300 millones de dólares) anuales, y Plan de viabilidad no se pone en marcha poco se puede pensar sobre el futuro de la compañía", añadió. Cabanillas abogó por no convertir el conflicto de Aerolíneas en un problema político y expresó su rechazo a posibles medidas de boicot contra empresas españolas con inversiones en Argentina. Según el portavoz, "los problemas en AA son de carácter empresarial", por lo que pidió a los sindicatos que sean razonables para "llevar a buen término el futuro de la empresa". Al respecto, el portavoz del gobierno explicó que espera que los sindicatos que se niegan a aceptar una solución, "se muestren comprensibles". Cabanillas destacó que "además de carecer de una postura razonable, este conflicto se quiere convertir en un proceso de mayor trascendencia, lo que es un error y una fórmula de presión". Cabanillas explicó que durante el último año el Estado español ha aportado cerca de 119.081 millones de pesetas (715,69 euros/617 millones de dólares) para garantizar y cubrir las operaciones de la compañía aérea, lo que se suma a los 231.600 millones de pesetas (1.391 millones de euros/1.200 millones de dólares) entregados en el periodo 1990-1996. En opinión del portavoz del Ejecutivo español, "estas cantidades se plantearon junto a un Plan Director, destinado a normalizar la situación de la empresa, que solamente ha sido rechazado por uno de los siete sindicatos de Aerolíneas Argentinas". La SEPI, propietaria del 91,2 por ciento del capital de AA, inició el pasado miércoles, día, 30, "un periodo de reflexión" para encontrar una solución urgente a la crisis de la aerolínea. La "reflexión" de la SEPI se produjo tras el fracaso de las negociaciones que el martes, día 29, tuvieron lugar en Madrid entre la ministra de Trabajo argentina, Patricia Bullrich, el presidente de la SEPI, Pedro Ferreras y el secretario general del sindicato de la Asociación de Personal Técnico Aeronáutico (APTA), Ricardo Cirielli, "que rechaza categóricamente el Plan Director de la SEPI destinado a reflotar a la compañía". Por su parte, el secretario de Estado de Economía, José Folgado, destacó que el Ministerio de Economía considera que la SEPI tiene un comportamiento "absolutamente responsable" con respecto al futuro de la empresa y aseguró que la SEPI ha demostrado que dirige sus esfuerzos a consolidar a Aerolíneas Argentinas como una empresa "competitiva y moderna". En este sentido, Folgado comentó que en el marco del actual proceso negociador se ha llegado a acuerdos con seis de los siete sindicatos de Aerolíneas, por lo que confía "en que la situación se normalice en un futuro próximo. Folgado subrayó que la SEPI tiene previsto invertir "mucho dinero" para hacer de Aerolíneas una empresa competitiva, y pidió que "por el bien de todos" las conversaciones mantenidas con los sindicatos consiga los objetivos perseguidos.
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