El árbitro designado por el gobierno español para mediar en el conflicto de Iberia impone un convenio a cuatro años con subidas vinculadas a la marcha de la compañía

El árbitro designado por el gobierno español para mediar entre Iberia y el SEPLA y presidente en funciones del Consejo Económico y Social (CES), Federico Durán López, anunció ayer el resultado del arbitraje obligatorio vinculante impuesto por el gobierno, según el cual las partes deberán firmar un convenio a cuatro años con subidas vinculadas a la marcha de la compañía. Asimismo, el laudo propone la creación de una comisión formada por cinco miembros, dos de la compañía y otros dos del sindicato de pilotos, y otro designado por acuerdo mutuo, para dirimir los conflictos que pudieran producirse entre las partes. A juicio de Durán, el laudo "garantiza la paz social durante cuatro años" y abre una nueva etapa de mayor confianza y colaboración", que debe atender a los intereses de la compañía, la economía nacional y los trabajadores. "Espero que con un moderado grado de satisfacción por ambas partes, en el futuro unos y otros pongan las bases para que en los próximos cuatro años se desarrollen unas relaciones laborales que permitan mejorar los resultados", dijo. Asimismo, destacó que con esta decisión "no hay vencedores ni vencidos", ya que resuelve "en equidad" los puntos conflictivos sobre el VII convenio colectivo de pilotos y las peticiones de ambas partes, "que eran igual de respetables". En este sentido, señaló que el objetivo de su decisión es "salvaguardar los legítimos intereses de los trabajadores y las exigencias económicas de la empresa en un mercado como el del transporte aéreo cada vez más competitivo y abierto". Finalmente, destacó la dificultad técnica del conflicto y el corto plazo, de cuatro días, en el que debía anunciar la solución, por lo que agradeció a las dos parte la colaboración que han prestado y que ha facilitado la actividad del árbitro. Sobre las disposiciones del laudo en relación al incremento salarial de los pilotos, el presidente de Iberia, Xabier de Irala, aseguró, tras conocer la decisión del árbitro, que recoge "la valoración económica que ofrecía la empresa" al SEPLA, y que se componía de una subida del IPC más el 0,5 por ciento para los cuatro años de convenio y la recuperación de la clave 104 vinculada a la mejora de resultados y productividad. De Irala explicó que estas propuestas permitirán abrir un proceso de paz social en la compañía. "El laudo propone un conjunto de medidas que van a permitir abrir un período de cuatro años sin conflictividad, que beneficiarán a la compañía, a los ciudadanos y a los inversores", concluyó.