Barceló abandonará definitivamente el proyecto del Palacio de Congresos de Palma

La cadena hotelera tiene diez días para estudiar las condiciones del documento que se le ha presentado. Hace ya dos años manifestó su intención de salir del proyecto por diversas irregularidades jurídicas y económicas. En caso de que acepte la propuesta podrá salir del proyecto sin ser penalizada.

Fuentes del Ayuntamiento de Palma han defendido que no se ha penalizado a Barceló porque no hubo nunca incumplimiento del contrato. No obstante, se le ha exigido que devuelva la cifra de 4 millones de euros correspondiente al IVA de las certificaciones de obra como condición para resolver el contrato de concesión de las obras de esta infraestructura.

Objetivo primordial: seguir con las obras

El presidente del Govern, Francesc Antich, y la alcaldesa de Palma, Aina Calvo, han asegurado que su intención primordial no era penalizar a la empresa sino evitar la paralización de la obras. Prevén que el acuerdo alcanzado permitirá que la obra continúe sin que haya retrasos en su plazo previsto de finalización, finales de 2011 y principios de 2012, y sin sobrecostes, según han asegurado hoy en una rueda de prensa
Ante esta situación será la administración la que asumirá su construcción, que será ejecutada por la empresa Acciona.

La inversión y los plazos previstos se mantienen

El dinero necesario para construir el Palacio se mantiene en los 106 millones de euros inicialmente previstos, con la diferencia de que ahora se pagará íntegramente con dinero público (Barceló debía antes asumir 70 millones del coste), que se espera pueda ser recuperado a través de un canon a la empresa que explote la infraestructura.

Aún no se sabe cuándo se realizará el nuevo concurso para adjudicar la gestión y explotación del futuro Palacio de Congresos, pero Antich quien ha expresado su intención de que sea a finales de febrero, si bien aún no ha habido empresas que hayan manifestado su interés en participar.
No obstante, tanto Antich como Calvo se han mostrado confiados en que sí habrá firmas interesadas en el concurso ya que las condiciones del mismo cambiarán ahora y solo se ofrecerá la gestión y la explotación, no el compromiso de la construcción, que se garantizará por vía pública.