Los inversores mantienen los castigos sobre las compañías relacionadas con el sector turístico y desde que se produjeron los atentados en Estados Unidos estas empresas acumulan recortes superiores al 20 por ciento.
Los inversores mantienen los castigos sobre las compañías relacionadas con el sector turístico y desde que se produjeron los atentados en Estados Unidos estas empresas acumulan recortes superiores al 20 por ciento. El temor a que se agudice la desaceleración económica e incluso la posibilidad de una recesión en Estados Unidos está lastrando la cotización de estas compañías, que pueden ver mermada su cuenta de resultados. En concreto, la central de reservas Amadeus acabó la jornada con un recorte del 4,17 por ciento, con lo que el primer cambio al que mañana se cruzarán operaciones sobre este valor será de 5,75 euros. Durante las últimas tres sesiones, acumula un descenso del 28,1 por ciento. Iberia tampoco escapó ayer de los recortes y hoy empezará la contratación en 0,87 euros, tras dejarse un 6,45 por ciento. El precio de ayer es el más barato al que cotiza la aerolínea desde que debutó en el parqué; y desde que se produjeron los atentados pierde un 39,1 por ciento. Las empresas hoteleras que cotizan en el parqué están viendo como los inversores huyen de estos títulos y buscan refugio para su dinero en otros activos más seguros: NH Hoteles cedió ayer un 1,98 por ciento, con lo que iniciará hoy la jornada en 8,90 euros, y pierde en tres días un 23,2 por ciento. Sol Meliá también está siendo otro de los valores más castigados por los inversores y desde que sucedieron los atentados en Estados Unidos, su valor en bolsa es un 22,6 por ciento inferior, tras caer ayer un 0,43 por ciento, hasta los 6,92 euros.
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