La nueva Junta del Fomento del Turismo, que tomará posesión el próximo 17 de diciembre, desea dar un nuevo rumbo a la política turística. Durante la cena anual de la institución, en el que se entregaron los galardones 2001, Miquel Vicens lanzó un reto a la presidenta del Consell de Mallorca, Maria Antònia Munar: «Asumir lo antes posible un mayor protagonismo en la política turística, al igual que ha hecho en materia de ordenación urbanística y en la gestión de las infraestructuras de la Isla». Vicens pidió sin dilaciones a Munar, que no asistió a la cena, como tampoco lo hizo el presidente del Govern, Francesc Antich, que acepte las transferencias de turismo «si se las proponen y, sino que las reclame».
La nueva Junta del Fomento del Turismo, que tomará posesión el próximo 17 de diciembre, desea dar un nuevo rumbo a la política turística. Durante la cena anual de la institución, en el que se entregaron los galardones 2001, Miquel Vicens lanzó un reto a la presidenta del Consell de Mallorca, Maria Antònia Munar: «Asumir lo antes posible un mayor protagonismo en la política turística, al igual que ha hecho en materia de ordenación urbanística y en la gestión de las infraestructuras de la Isla». Vicens pidió sin dilaciones a Munar, que no asistió a la cena, como tampoco lo hizo el presidente del Govern, Francesc Antich, que acepte las transferencias de turismo «si se las proponen y, sino que las reclame». Para el máximo responsable del Fomento de Turismo de Mallorca, «Munar es antes responsable que lista y, a la vista de los problemas que nos afectan, no tiene que rechazar este reto». «Que no se preocupe por la dotación económica», espetó Vicens, ya que «si hay un buena gestión pública del turismo, el propio sector aportará cuantos medios sean necesarios». Más promociones Por otro lado, conminó a las administraciones a que arreglen «inmediatamente y sin discusiones» los destrozos ocasionados tras el último temporal. Asimismo, solicitó a Turespaña, Ibatur y ayuntamientos turísticos que pongan en marcha antes de enero fuertes campañas de promoción en los principales mercados de origen, como apoyo a las acciones de publicidad que los empresarios ya están llevando a cabo. A juicio de Vicens, «lo que no necesitamos es el desentendimiento entre responsables de cuatro administraciones que nos cuestan un ojo de la cara», por lo que exigió «más eficacia y mayor lealtad» tanto a la hora de actuar como a la de colaborar. También, el presidente del Fomento hizo un llamamiento para que se rechacen los argumentos que atribuyen al turismo todos los males y problemas, «en vez de asumir la responsabilidad de resolverlos». Asimismo, Vicens invitó al sector turístico a participar en las reuniones que la nueva Junta tiene previsto organizar para valorar la situación actual y abordar los retos del futuro. Entre los asuntos que se pondrán sobre a mesa, citó el estado de las infraestructuras del transporte y el impulso de la racionalización de la política turística de la comunidad, «que últimamente no ha sido consensuada con el sector turístico privado». En lo que se refiere a infraestructuras, Vicens criticó «la campaña contra la mejora de las pistas del aeropuerto o el proyecto para suprimir el tramo de autopista entre la vía cintura y el muelle de Levante, sin antes asegurar una vía de servicio para aquél». Durante su discurso, Miquel Vicens hizo balance de la pasada temporada, poniendo en tela de juicio el baile de cifras y estadísticas y tildó de negativa temporada del sector. Ante las incertidumbres, que ha desencadenado el 11 de Septiembre, recomendó a los empresarios que mantengan los precios y ganen la batalla de la calidad. En este sentido, coincidó el conseller de Turismo, Celestí Alomar, al asegurar que «la diversifación y la calidad nos colocan en una situación de privilegio ante los destinos competidores». Asimismo, lanzó un mensaje de optimismo y tranquilidad ante la crisis internacional y la recesión económica. «Las administraciones están haciendo un esfuerzo para mantener la cuota en los principales mercados emisores de Baleares e incrementar los índices en el nordico, francés, italiano o español», sostuvo Alomar. (Cheska Díaz, diario El Mundo-El Día de Baleares, 30/11/01)
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