El Gobierno español acometerá obras de emergencia en las 28 playas malagueñas afectadas por el fuerte temporal de levante que azotó hace unas semanas al litoral de la provincia e intentará que "concluyan lo antes posible" para que estén listas al comienzo de la temporada turística en Semana Santa, según aseguró el director general de Costas, José Trigueros.
El Gobierno español acometerá obras de emergencia en las 28 playas malagueñas afectadas por el fuerte temporal de levante que azotó hace unas semanas al litoral de la provincia e intentará que "concluyan lo antes posible" para que estén listas al comienzo de la temporada turística en Semana Santa, según aseguró el director general de Costas, José Trigueros. Trigueros, quien recorrió ayer en helicóptero el litoral malagueño para ver las zonas afectadas, explicó a los periodistas que tras la realización de un balance, que la Dirección General de Costas contará a finales de la próxima semana, el Consejo de Ministros autorizará la realización de unas obras de emergencia para que el litoral malacitano "recupere el perfil que tenía antes de estos temporales" lo más pronto posible. El representante del Ministerio de Medio Ambiente mostró su esperanza de que las obras concluyan "lo antes posible", de modo que "en Semana Santa pueda estar todo resuelto". Si alguna playa no pudiera estar lista para esa fecha, el Ministerio de Medio Ambiente se compromete a que "en verano estará ya todo en perfecto estado", destacó Trigueros. "Quiero tranquilizar a todos los sectores económicos que viven del turismo, e incluso a aquellos que tienen sus intereses puestos en la temporada veraniega e incluso de Semana Santa, porque el Gobierno va a actuar con toda rapidez", aseguró Trigueros. Trigueros indicó que hay una primera evaluación "no exhaustiva" que señala que son necesarios unos 1.000 millones de pesetas (60 millones de euros) para solucionar los problemas del litoral malagueño. Sin embargo, Trigueros se comprometió a que si esta cantidad es "insuficiente" el Ministerio de Medio Ambiente aportará el dinero que sea necesario. "De lo que se trata es de devolver la calidad al litoral malacitano desde una punta a la otra", aseguró Trigueros, quien señaló que lo que pretende es que "no se pueda achacar al estado de las costas" una posible disminución de la entrada de turistas a la provincia.
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