Matutes cuestiona el nuevo logotipo de Ibiza y pide al Gobierno balear que reflexione sobre la ecotasa

El ex ministro español de Asuntos Exteriores, Abel Matutes, también conocido empresario de Ibiza, ha advertido en Madrid en el desarrollo de la conferencia internacional de Exceltur, de los "gravísimos perjuicios en estos momentos de incertidumbre" que generaría la ecotasa balear y sobre todo "su impacto sicológico importante".Matutes recordó que hay que ser conscientes que en España la actividad turística es fundamental en la economía del país y en Baleares "todos vivimos directamente o indirectamente del turismo". Afirmó que tras los atentados del 11 de septiembre en Estados Unidos el sector vive "un momento delicado" y lo que tiene que hacer los gobernantes por encima de todo es buscar "los beneficios generales". "Vamos a esperar" cuál es la decisión final del Ejecutivo balear, comentó, recordando que "el propio presidente Antich afirmó que si la situación no era adecuada, era un tema cuya aplicación podría retrasarse". También indicó que en los últimos días "en el seno de la fuerza política que le apoya", refiriéndose seguramente a Unió Mallorquina y a su presidenta , Maria Antonia Munar, presidenta también del Consell Insular de Mallorca (CIM); desde el Consell de Menorca y el alcalde de Formentera "han levantado su voz pidiendo prudencia y diálogo y que se reconsidere si éste es el momento oportuno para aplicar este impuesto penalizador de la actividad turística". "No vayamos a entrar ahora en descalificaciones", confiando en que el Govern balear "anteponga este interés general a cualesquiera otras consideraciones". En relación a la nueva imagen turística de Baleares, Matutes criticó tanto el color rojo elegido por los responsables de la campaña del Gobierno autonómico como el cambio de su denominación Ibiza por Eivissa (en catalán). "El logo rojo que ahora se han inventado para Ibiza", no le gusta a Matutes. " Se ha cometido un grave error al hacer una promoción turística prescindiendo del color blanco", que es tradicional en la Islas, " exhibiendo el rojo cuando queremos el turismo familiar y que el turismo discotequero y bullicioso tenga un menor peso". Calificó de "desperdicio" no aprovecharse del potencial del nombre de marca de Ibiza en los mercados exteriores como EE. UU, Alemania o Gran Bretaña, al cambiarlo por Eivissa. "No es un acierto". "Con diálogo y seriedad se puede arreglar". (HOSTELTUR)