El Gobierno argentino prevé que la caída del 50 por ciento de los precios turísticos reactivará la demanda

El Gobierno argentino prevé que la caída en torno al 50 por ciento de los precios turísticos reactivará la demanda, principalmente en los países limítrofes y cercanos (Brasil, Uruguay, Paraguay, México y Estados Unidos, entre otros), que le proporcionan la mayor parte de sus visitantes, según aseguró en una entrevista concedida a Europa Press el coordinador ejecutivo de Promoción, Desarrollo y Calidad Turística de la Secretaría de Turismo y Deporte argentina, Germán Luis Pérez. Pérez reconoció que esta reducción en los precios va a suponer que los empresarios turísticos reduzcan sus ingresos, pero a pesar de todo, afirmó que Argentina ingresará por turismo entre 5.192,7 y 5.769,7 millones de euros (864.000 y 960.000 millones de pesetas/4.500 y 5.000 millones de dólares) en 2002, entre un 50 y un 66,6 por ciento por ciento más que los 3.461,8 millones de euros (576.000 millones de pesetas/3.000 millones de dólares) de este año. Argentina recibió en 2001 cerca de 2,8 millones de turistas, una cifra "similar" a la de 2000, según Perez, quien añadió que el principal mercado emisor es Brasil. "En este momento los ingresos por turismo suponen el 7,4 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB) y el objetivo es que 2002 alcance el 11 por ciento del PIB, explicó Pérez, quien dijo que el turismo "se va a convertir en el primer motor de la economía argentina, ya que puede atraer la entrada de divisas sin realizar grandes inversiones". El coordinador ejecutivo reconoció que la crisis en el país ha provocado un descenso "importante" de la ocupación, aunque resaltó que en estos momentos se ha recuperado "cerca de un 20 por ciento". "La ocupación en las zonas turísticas en estos momentos es similar a la del año pasado y en resto de las zonas está un 30 por ciento por debajo, pero confiamos en que pueda recuperarse", resaltó Pérez y añadió: "Venimos a Fitur a mostrar que seguimos vivos y tenemos fuerzas para recuperarnos, y que los sucesos acaecidos en Argentina no son tan graves como para no poder salir de la crisis".