Representantes de la Administración y empresas privadas apuestan por potenciar el turismo residencial y los viajes de la tercera edad para luchar contra la estacionalidad del sector, tal como pusieron de manifiesto durante una mesa redonda organizada por la escuela de negocios ESADE en Barcelona.
Representantes de la Administración y empresas privadas apuestan por potenciar el turismo residencial y los viajes de la tercera edad para luchar contra la estacionalidad del sector, tal como pusieron de manifiesto durante una mesa redonda organizada por la escuela de negocios ESADE en Barcelona. El jefe de Área de Vacaciones del Plan Gerontológico y Programas para Mayores del Instituto Nacional de Migraciones y Servicios Sociales (IMSERSO), Manuel Carreño, abogó por aumentar los viajes de la tercera edad para "paliar los efectos negativos de la industria turística", ya que estos viajes se realizan sobre todo en temporada baja, de octubre a abril, meses en los que se registran unos 5 millones de estancias de este tipo. El IMSERSO pretende realizar intercambios con jubilados de otros países como Suiza o Francia, una iniciativa que ya lleva a cabo con Portugal. Según Carreño, de cada euro que el estado invierte en los viajes del IMSERSO, recupera directa o indirectamente 1,2 euros. El director gerente del Forum Mare Nostrum, Pablo Escobar, explicó la experiencia de su proyecto de conjunto residencial de 680 viviendas para gente mayor en Alfaz del Pi (Alicante). Las casas disponen de alarmas de seguridad y de corte de energía, así como cámaras por control remoto conectadas con un edificio central. El conjunto residencial cuenta también con un comedor para unas 500 personas, una zona de fisioterapia, un centro de belleza y la posibilidad de alojarse en media pensión o pensión completa. Escobar explicó que el cliente de estas residencias es "un europeo no español porque su poder adquisitivo es superior". El presidente del Colegio Oficial de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria de Tarragona, Gil Cristià, subrayó la oportunidad que supone para la Costa Daurada aprovechar el turismo de la gente mayor "porque dura todo el año". Cristià destacó las posibilidades que tiene la zona para este segmento de población, como las playas, las excursiones por la naturaleza, el golf y la cultura, como la ciudad de Tarragona o la ruta del Cister. Por su parte, el presidente del Colegio Oficial de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria de Girona, Jordi Lluís Pardo, planteó algunos de los "peligros" de este sector en el futuro, como si se podrán mantener las pensiones del Estado y los plantes privados de pensiones. En opinión de Pardo, los profesionales del turismo deben hacer que la gente mayor que se aloja en zonas residenciales "se sienta como en casa, en un entorno político, social y cultural que genera confianza y facilite su integración".
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