España: El presidente de Aeca afima que el aplazamiento de la ecotasa sólo será útil si se decide pronto

"Si se va a demorar la aplicación de la ecotasa, que se haga ya, porque sino no se va a poder negociar en condiciones con los mercados emisores», reclamó ayer el presidente de la Asociación Española de Compañías Aéreas, Aeca, Felipe Navío, en el transcurso de la conferencia que con el título «Panorama del transporte aéreo tras el 11 de septiembre» pronunció en el Gran Hotel de Palma de Mallorca, organizada por la Asociación Balear de Directivos. En relación con la tasa que grava las pernoctaciones en hoteles y apartamentos turísticos Navío se mostró contundente al afirmar que si no se toma urgentemente una decisión política para que se postergue, «va a dar lo mismo, porque el tiempo pasa y luego no habrá tiempo para incentivar el mercado». El presidente de Aeca recordó que el lema de una reciente campaña de un país árabe y competidor de la ribera del Mediterráneo era: «Tiene un país amigo a su servicio, venga a vernos». Frente a esto, «nosotros generamos noticias negativas, y ello se traducirá en más paro y menos riqueza». El presidente de Aeca dijo que desde la asociación se percibe un sentimiento de desconsideración por parte de la sociedad y del actual Gobierno balear y pidió que a las compañías aéreas se las vea como «aliados y generadores de riqueza que es, simplemente, lo que somos». De hecho, Navío criticó a los políticos por no apoyar a las compañías aéreas para que establezcan sus bases operativas en Palma «ya que ello genera actividad económica, puestos de trabajo y riqueza para las Islas». «Invertir en aviación es mejorar las comunicaciones y elevar el nivel de vida de los ciudadanos y un complemento para el resto de actividades empresariales y de negocio, máxime en un archipiélago», explicó Navío. Sin abandonar esta línea argumental comentó que «el hecho de que un país (comunidad autónoma) tenga compañías aéreas estabiliza los flujos turísticos, sobre todo en épocas de baja actividad, y rompe con la estacionalidad». Por espacio de media hora diseccionó al sector aéreo con tal precisión que no dejó ningún asunto sin tratar. Habló del antes y después del atentado a las Torres Gemelas y de Aena, ente público al que dedicó sus más jugosas críticas. Según Navío, Aena incrementó las tasas aeroportuarias y de navegación a partir del 1 de enero, cuando todas las compañías rebajaban los precios para estimular un mercado decaído tras los atentados. «Mientras el ente público, que monopoliza la gestión de todos los aeropuertos españoles, tuvo unos beneficios el pasado año de 25.000 millones las compañías tienen dificultades». A esto hay que sumar el hecho de que mientras en el resto de Europa los vuelos interiores tienen IVA reducido, en España no. Y ello, a criterio de Navío, impide que se programen más vuelos, haya más empleo y se genere mayor flujo recaudatorio, con el consiguiente beneficio para las arcas del Estado. El presidente de Aeca propuso una fórmula para reducir tasas: ésta pasa porque el Estado sufrague, con los Presupuestos, los gastos de los aeropuertos deficitarios, que en la mayoría de las ocasiones son declarados de interés social o general, «pero le resulta más fácil que el déficit lo cubra Aena con las tasas». La rebaja de tasas puede combatir, según piensa Navío, la estacionalidad. «Consiste en bajar las tasas en invierno para propiciar la bajada de precios de los vuelos y potenciar, consiguientemente, el incremento de pasajeros». (D.F.B:, diario El Mundo-El Día de Baleares, 20/03/02)