La compañía aérea suiza Crossair, que se hizo cargo en octubre pasado de las operaciones de Swissair tras su quiebra, registró pérdidas de 213,54 millones de euros en 2001 (314,03 millones de francos suizos), lo que supone unas pérdidas doce veces superiores a las registradas en 2000 cuando tuvo un resultado negativo de 17,15 millones de euros (25,23 millones de francos suizos).
La compañía aérea suiza Crossair, que se hizo cargo en octubre pasado de las operaciones de Swissair tras su quiebra, registró pérdidas de 213,54 millones de euros en 2001 (314,03 millones de francos suizos), lo que supone unas pérdidas doce veces superiores a las registradas en 2000 cuando tuvo un resultado negativo de 17,15 millones de euros (25,23 millones de francos suizos). Los resultados se deben a la ralentización general de la economía, al debilitamiento de la demanda aérea debido a los atentados terroristas en Estados Unidos el pasado 11 de septiembre, a los cambios en la dirección de SairGroup tras la quiebra de Swissair en octubre, así como al accidente aéreo del pasado 24 de noviembre en el que 24 personas perdieron la vida, según explicaron hoy el presidente y consejero delegado de Crossair, André Dosé, y el presidente del comité ejecutivo, Pieter Bouw. "El año 2001 fue, sin ninguna duda, el peor año de la historia de Crossair y, además, fue un año en el que se inició el proceso de transformación de la compañía de una aerolínea regional a la aerolínea de bandera suiza, con una red internacional. Esta expansión se basó en el deseo y la determinación de Suiza de asegurar que el país seguirá teniendo una aerolínea nacional", afirmaron. El número de pasajeros transportados por la compañía ascendió a 5,93 millones de viajeros en 2001, un 6 por ciento menos que en 2000. El total de vuelos operados fue de 165.686, un 3 por ciento menos que en el año anterior, mientras que la oferta de plazas se redujo un 4 por ciento. Así, el factor de ocupación se situó en el 51 por ciento, un 1 por ciento inferior al registrado en 2000. Los ingresos operativos crecieron un 9 por ciento, hasta los 947,51 millones de euros (1.393,4 millones de francos suizos), debido al trasvase el pasado mes de octubre de las operaciones de Swissair a Crossair. Los gastos operativos también se incrementaron hasta superar los 898,08 millones de euros (1.320,72 millones de francos suizos) en 2001, un 11 por ciento más que en el año anterior, debido a los precios del combustible (a pesar de que descendieron en la segunda mitad del año), el cambio desfavorable al dólar, el incremento de las primas de los seguros y los gastos extraordinarios por el lanzamiento de Swiss, la compañía que sustituirá a Swissair y Crossair a partir del 31 de marzo. De esta forma, el resultado operativo refleja unas pérdidas de 186,57 millones de euros (274,37 millones de francos suizos) frente a las pérdidas de 5,7 millones de euros (8,4 millones de francos suizos) de 2000.
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