Los empresarios turísticos andaluces ven con "incertidumbre" el comportamiento de este sector durante el verano que está a punto de comenzar, ya que la tendencia cada vez mayor a realizar las reservas a última hora por parte de los europeos hace que aún se desconozca cómo va a funcionar el turismo durante este año en temporada alta.
Los empresarios turísticos andaluces ven con "incertidumbre" el comportamiento de este sector durante el verano que está a punto de comenzar, ya que la tendencia cada vez mayor a realizar las reservas a última hora por parte de los europeos hace que aún se desconozca cómo va a funcionar el turismo durante este año en temporada alta. El presidente del Consejo de Turismo de la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA), Miguel Sánchez, destacó a Europa Press que lo habitual es que los hoteles de la región, a estas fechas, tengan ya "el 80 por ciento de las reservas para verano" cerradas. Sin embargo, este año no está siendo así debido a que los alemanes y británicos, sobre todo, se están demorando más para hacer las reservas. De este modo, los alemanes han realizado hasta el momento un 13 por ciento menos de reservas de paquetes para pasar sus vacaciones de verano que el mismo año por estas fechas, mientras que en Inglaterra "es aún peor" ya que el descenso es del 18 por ciento. Sin embargo, se observa "cierta recuperación" de esta tendencia, que está afectando a "todos los destinos del mundo" y de España, ya que hace tres semanas las reservas realizadas por los alemanes para verano eran un 19 por ciento inferior. Este retraso se da, "sobre todo", en los paquetes vacacionales, según destacó Sánchez. Esta ralentización en las reservas provoca una "incertidumbre tremenda" respecto al verano, aunque Sánchez mostró su esperanza de que "los clientes vengan como otros años", aunque esta tendencia a retrasar las reservas "nos ocasiona unos trastornos de organización tremendos, al no saber con antelación las previsiones que tenemos para cada mes". En cuanto al mercado español, Sánchez explicó que "lo habitual" es que no empiece a reservar sus vacaciones de verano hasta el mes de mayo, así que su comportamiento durante 2002 se espera que sea "al que nos tenía acostumbrado".
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