El Consejo Económico y Social (CES) de Cantabria ha valorado de forma positiva la puesta en marcha de un Plan Estratégico para el Turismo (PET), pero exige una "revisión integral" y una "redefinición" de todo el texto antes de su aprobación y presentación a la sociedad, por considerar que "adolece de múltiples deficiencias".
El Consejo Económico y Social (CES) de Cantabria ha valorado de forma positiva la puesta en marcha de un Plan Estratégico para el Turismo (PET), pero exige una "revisión integral" y una "redefinición" de todo el texto antes de su aprobación y presentación a la sociedad, por considerar que "adolece de múltiples deficiencias". En su informe sobre el Plan Estratégico de Desarrollo y Ordenación Turística de Cantabria, el CES señala como "defecto más capital" del documento "la ausencia de definición de unos objetivos específicos", objetivos que, en su opinión, "aparecen desdibujados y no están reflejados con la adecuada claridad". Considera también que el documento cuenta con dos partes "claramente diferenciadas". "La primera establece los objetivos, y la segunda contempla las actuaciones, mezclándose datos del año 1999, 2000 y 2001", lo que a juicio del CES, indica que "se han elaborado en épocas distintas y que, posteriormente, no se ha hecho el esfuerzo de homogeneizar el texto". Además, el Consejo Económico y Social "echa de menos" aspectos "esenciales" de carácter general que "no se abordan con la suficiente amplitud", como "la falta de profundización en el problema de la estacionalidad; la de un diagnóstico sobre la situación turística" que oriente la posterior toma de decisiones a la hora de elegir entre todas las líneas de acción posibles; o "la falta de un análisis sobre la formación". El plan, dice el CES, "no aborda rigurosamente" el tema de la formación y la estabilidad de los trabajadores del sector. "La formación y profesionalización, que es uno de los principales problemas del turismo, así como la falta de estabilidad de los trabajadores, se analizan muy superficialmente y no se realiza el análisis de las medidas para conseguir una necesaria profesionalización", señala. Por otro lado, el CES considera que las descripciones de Cantabria "no parecen acertadas" para ser incluidas en un Plan de Turismo, y pone como ejemplo el siguiente fragmento sobre el medio físico: "La zona costera constituida por una estrecha franja del territorio, es acantilado en su mayor parte (171 kilómetros) y sólo el 22 por ciento son playas de arena (47 kilómetros), en 20 municipios; está sometida a una intensa y frecuente acción del mar (galernas). Tiene una media anual de 170 días de precipitación (120 en Reinosa) y 38 días despejados". El CES estima que, con esta descripción, "es difícil potenciar la imagen de Cantabria como destino turístico", descripción que por otra parte, añade, "contradice" una de las recomendaciones técnicas que recoge el plan, en la que se establece que "deberán comunicarse aspectos positivos de la situación climática de Cantabria, desfavorable en principio respecto de otras zonas turísticas". En el PET también se indica que se está elaborando un Inventario Regional de Recursos Turísticos. Para el CES, resulta "sorprendente" que dicho inventario no sea previo al plan. El informe destaca los "innumerables aspectos positivos" que recoge el PET, como la puesta en marcha del Club de Calidad para el turismo rural, la creación de la Tarjeta Verde o la pretensión de desarrollar un turismo sostenible, es decir, "tener en cuenta los efectos medioambientales del turismo". El CES afirma que estos aspectos deben ser aprovechados pero, en sus conclusiones, reclama una "urgente" y previa revisión del texto antes de su aprobación.
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