G. Bretaña: El Concorde de British registra un nivel de reservas para este verano superior al de antes del accidente de 2000

La compañía British Airways (BA) registra un volumen de reservas para este verano superior al alcanzado antes del accidente del Concorde de Air France el 25 de julio de 2000 en París, según explicaron a Europa Press fuentes de la aerolínea británica.Según señalaron fuentes de BA, "la compañía ha transportado más de 2,5 millones de pasajeros en el Concorde desde el comienzo de estos vuelos en 1976". Air France opera entre París-Charles de Gaulle y Nueva York-JFK cinco veces a la semana (menos los martes y sábados), mientras que British Airways (BA) opera siete veces a la semana entre Londres-Heathrow y Nueva York-JFK y un servicio especial a la semana a las Islas Barbados entre noviembre y abril. El Concorde vuela a una altura de 18.000 metros sobre el nivel del mar, por lo que los vuelos son "particularmente cómodos", ya que no existen turbulencias atmosféricas. La velocidad de crucero que alcanza este aparato es de 2,04 Mach (2.200 kilómetros por hora) y el tiempo estimado del viaje entre París/Londres y Nueva York es de tres horas y 20 minutos, aunque fuentes de Air France matizaron que, teniendo en cuenta las restricciones de tráfico aéreo de esta ruta, el tiempo podría situarse en tres horas y 55 minutos. En cuanto al perfil del turista, fuentes de Air France indicaron que el 50 por ciento de los turistas que viajan en Concorde de Air France son norteamericanos y el 48 por ciento son europeos, de los que dos terceras partes residen en Francia. El 67 de los turistas que utiliza este medio de transporte para viajar entre París y Nueva York son viajeros de negocios, de los cuales el 80 por ciento son hombres y el 20 por ciento, mujeres y el 52 por ciento son pasajeros en conexión. Fuentes de BA señalaron que la mayoría de los viajeros que vuelan en Concorde son turistas de negocios. Otro de los datos que la compañía gala destaca es que los que vuelan en Concorde son "viajeros frecuentes leales", ya que lo utilizan una media de cuatro veces al año e, incluso, algunos viajan casi cada mes. El Concorde volvió a operar el 7 de noviembre de 2001 después de que obtuviera el certificado de navegabilidad. Este avión dejó de volar tras el accidente ocurrido el 25 de julio de 2000 en París que se cobró la vida de 113 personas. Air France y British Airways invirtieron 43,68 millones de euros (42 millones de dólares) en las modificaciones de seguridad necesarias para garantizar el funcionamiento correcto del avión. La empresa Michelin produjo una nueva generación de neumáticos especiales para el Concorde, denominados NZG, que en caso de estallar o deformarse se romperían de tal forma que sus fragmentos serían más flexibles y pequeños. También se cambiaron los deflectores de agua, ya que al ser los nuevos neumáticos más anchos, fue necesaria modificar la geometría de estos deflectores colocados en cada uno de los equipos de aterrizaje. Asimismo, se reforzó el cableado en el área del tren de aterrizaje principal para evitar chispas eléctricas en caso de avería y prevenir cualquier riesgo de ignición debido a una fuga de combustible. Uno de los resultados de estas modificaciones fue la reducción del número de pasajeros de 100 a 92 para compensar el aumento de peso que supuso el revestimiento de kevlar-mastic del depósito de combustible, los nuevos neumáticos de Michelin y el refuerzo de todo el paquete eléctrico. Por otra parte, tras los atentados del 11 de septiembre se estableció la norma de utilizar sólo cubiertos de plástico, al igual que en resto de los aviones comerciales.