España: Barceló y Riu consideran que la huelga de hostelería de Baleares perjudicará seriamente la imagen exterior del destino

Las cadenas hoteleras Riu y Barceló, ambas con establecimientos en las Islas Baleares, contemplan con "preocupación" la convocatoria de huelga realizada por los sindicatos CC.OO. y UGT en el sector hostelero del Archipiélago los próximos días 26 y 27 de julio y 5, 6, 7, 16, 17 y 18 de agosto, ya que consideran que perjudicará seriamente la imagen que este destino proyecta en el exterior, según explicaron a Europa Press fuentes de estas compañías. Según señalaron fuentes de Riu, la compañía ha hecho una llamada a la prudencia y a la responsabilidad de los sindicatos y de la patronal para que se alcance un acuerdo para evitar la huelga, ya que ésta perjudicará a los hoteles, empleados, a la marca del propio destino y, sobre todo, a la imagen que se proyecta de Baleares hacia el exterior. "Baleares es un destino que ha sufrido mucho últimamente con precedentes tan negativos como la huelga del transporte terrestre discrecional del verano pasado y que aún está pasando factura este verano", indicaron fuentes de Riu, que cuenta con un total de 16 hoteles en el Archipiélago balear, de los que 15 están en Mallorca y uno en Formentera. La ocupación actual de los establecimientos de Riu en Baleares ronda el 80 por ciento, aunque esto se está consiguiendo "con un gran esfuerzo económico" por parte de la compañía, ya que Riu está presentando ofertas y promociones para estimular la demanda y llenar los hoteles para este verano, "sin bajar los niveles de calidad". Por su parte, fuentes de Barceló valoraron "muy negativamente" esta huelga, aunque se mostraron "optimistas", ya que esperan que al final la cordura se imponga y el conflicto se solucione. "Si finalmente se consuma este paro, las consecuencias serán muy negativas, sobre todo, en la imagen que se tiene del Archipiélago en el exterior, ya que la atención a los clientes se podría gestionar con mayor facilidad que durante la huelga del transporte terrestre discrecional del año pasado", explicaron. La ocupación que la cadena espera registrar este verano en los once establecimientos que tiene en Baleares se sitúa entre el 75 y el 80 por ciento, lo que supone una caída aproximada del 5 por ciento en relación a verano de 2001, aunque los ingresos se reducirán en menor medida, ya que Barceló, a diferencia de otras cadenas, ha mantenido los precios de principios de año para compensar la inversión que ha destinado a las reformas realizadas en varios hoteles de su red. Según señalaron fuentes de Barceló, la compañía confía en que se produzcan reservas de última hora por parte de turistas españoles que opten por veranear en Baleares, ya que hay menos probabilidad de que éstas las realicen turistas alemanes. "Las causas de la caída de las reservas en el Archipiélgado se centran en la crisis económica que atraviesan los principales mercados emisores, el impacto de los atentados del 11 de septiembre, la influencia de la 'ecotasa' y la huella que dejó la huelga en el transporte del año pasado", matizaron.