El ministerio español de Fomento se desmarcó ayer del sindicato de pilotos de Iberia al advertirle que no deben instrumentalizar ni frivolizar un asunto tan trascendente como la seguridad. El subsecretario del ministerio, Adolfo Menéndez, marcaba así distancias en el enfrentamiento que mantiene el sindicato de pilotos, Sepla, con la aerolínea a raíz de los últimos incidentes en algunos de sus aviones.
El ministerio español de Fomento se desmarcó ayer del sindicato de pilotos de Iberia al advertirle que no deben instrumentalizar ni frivolizar un asunto tan trascendente como la seguridad. El subsecretario del ministerio, Adolfo Menéndez, marcaba así distancias en el enfrentamiento que mantiene el sindicato de pilotos, Sepla, con la aerolínea a raíz de los últimos incidentes en algunos de sus aviones.El Ministerio de Fomento, el regulador del transporte aéreo en España, se distanció ayer de los pilotos en la guerra abierta por este colectivo contra la dirección de Iberia con motivo de la seguridad en los aviones. El subsecretario, Adolfo Menéndez, en declaraciones a la Cadena SER, salió al paso de las acusaciones de los tripulantes, que ponen en tela de juicio la actuación de Iberia en esta materia a raíz de los últimos incidentes. 'Siempre hemos dicho que no se puede frivolizar ni instrumentalizar la seguridad', afirmó. Respecto a la posición del ministerio, que en varios de esos incidentes ha remarcado públicamente la responsabilidad de Iberia, el subsecretario sostiene que es coherente. 'La actuación del regulador siempre es la misma en materia de seguridad. Cuando las cosas funcionan bien, como es el caso de los Airbus 61 aparatos que requieren el cambio de los paneles de las bodegas a los que se ha hecho referencia, que no tienen ningún problema, hacemos auditorías de forma rutinaria para asegurarnos de que el funcionamiento es correcto. Se trata de una seguridad de prevención', explica el subsecretario. 'Por otra, cuando se produce un incidente concreto, se investiga para ver si hay algún problema y extender las medidas que de ahí se deriven con carácter preventivo a todas las compañías', concluye. Mientras tanto, los pilotos volvieron a insistir ayer en la polémica. El Sepla emitió una nota en la que expresa su confianza en que el Ministerio de Fomento ponga fin a la 'escalada preocupante' de incidentes aéreos en algunas compañías, con mención especial a Iberia. El sindicato indicó que respalda 'decididamente' las inspecciones y controles iniciados 'para depurar responsabilidades e instar a las compañías aéreas a una pronta solución que restaure la credibilidad de la seguridad aérea, máximo pilar del desarrollo de la aviación'. Sepla-Iberia ha convocado para el 24 de septiembre una asamblea en la que tomará medidas frente a las 'continuas' averías en aviones de Iberia. Por otra parte, un fallo en el sistema informático de la aerolínea ralentizó ayer durante una hora el proceso de facturación. En otro orden de cosas, Francisco Álvarez-Cascos, ministro de Fomento, advirtió ayer a las aerolíneas que vuelan en España que es necesario 'mantener la actual política de tasas aeroportuarias en los próximos años' para equilibrar los presupuestos del ente público propietario de los aeropuertos españoles y mantener su actual ritmo de inversión. Cascos realizó estas declaraciones en el acto de colocación de la primera piedra de las nuevas pistas del aeropuerto de Madrid-Barajas, junto al presidente de Gobierno José María Aznar. AENA aplicó a comienzos de este año una subida media del 2% en las tasas que cobra a sus clientes, las compañías aéreas que vuelan a las terminales de su red. Cascos aseguró que sólo con esta política de tasas AENA podrá seguir ejecutando inversiones de infraestructuras en los 46 aeropuertos de su propiedad, sin recurrir a la financiación presupuestaria. El titular de Fomento argumentó en favor del mantenimiento de su política de crecimiento de las tasas que son un 70% más baratas que 'las de cualquier aeródromo europeo'. Por otra parte, un estudio realizado por Mercer Management Consulting asegura que las aerolíneas de bajo coste multiplicarán por cinco su actual cuota de mercado del 5% en Europa y alcanzarán el 25% en 2010. La capacidad de crecimiento de este tipo de aerolíneas supondrá una fuerte 'presión' para las aerolíneas tradicionales como Air France, British Airways, Lufthansa, SAS o Iberia según resaltan los autores del informe. (A.R.A./J. Ch., diario Cinco Días, 19/09/02)
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