Galicia cuenta con una nueva normativa para hoteles y albergues

Según un comunicado emitido por la Xunta de Galicia, la modificación de la regulación de los establecimientos hoteleros introduce un sistema de calificación novedoso que permite tener en cuenta, por una parte, las infraestructuras y los cumplimientos de unos mínimos obligatorios para todos los establecimientos de la misma categoría, y por otra parte, los servicios prestados por los establecimientos, ofrecidos a libre elección de los titulares de los mismos.

Indica que este nuevo sistema de clasificación por puntos valora tanto la importancia de la percepción de calidad que tienen los consumidores y usuarios como los requisitos mínimos que tienen que cumplir en todo el territorio de la Comunidad Autónoma de Galicia, adecuados a los estándares generales del sector. Así mismo, incluye la posibilidad de mejorar la competitividad de los establecimientos, mediante un sistema flexible de clasificación con un espacio que permite la innovación empresarial.

La nueva legislación se ha orientado a adaptarse a las nuevas normativas europeas y mantiene el sistema de clasificación por estrellas, que “constituye una garantía de especial importancia para las personas usuarias turísticas, pues les permite asociar el número de estrellas otorgadas en cada establecimiento hotelero con un determinado nivel de calidad de instalaciones y servicios”.

Novedades

La nueva normativa establece las siguientes modalidades: hoteles, hoteles apartamentos, hoteles balneario, hoteles talaso y moteles. Así, se introduce una nueva categoría de hoteles balnearios que se corresponderá con aquellos establecimientos que contengan instalaciones y unidades de tratamiento con agua de mar natural como elemento diferenciador y esencial de su oferta. También la calificación de hotel talaso es novedosa.

El Consejo Gallego de Turismo también ha acordado el pasado viernes una nueva regulación para los albergues turísticos que introduce como principal novedad su clasificación en dos categorías: albergue turístico de primera categoría y albergue turístico de segunda categoría, sustituyendo a la actual clasificación por estrellas, de una, dos y tres estrellas.

Otra de las novedades es el reconocimiento de una categoría especial para los albergues de peregrinos del Camino de Santiago, caracterizados por estar situados en un área de tres kilómetros en torno al camino, gestionados por entidades sin ánimo de lucro o por reunir elementos esenciales del desarrollando dentro de su actividad una función hospitalaria para el peregrino.