La tasa turística de Barcelona, una tarta de 21 M € por la que se pelean los partidos

De los aproximadamente siete millones de euros del impuesto turístico que gestiona el Ayuntamiento de Barcelona, la mitad de dicho importe sirve para financiar diferentes iniciativas municipales (por ejemplo, contratación de agentes cívicos) y la otra mitad se transfiere al organismo de promoción Turisme de Barcelona.

Un debate electoral organizado por el Observatorio de Turismo Responsable de la Facultad de Turismo y Dirección Hotelera Sant Ignasi permitió constatar importantes diferencias sobre qué uso debería darse a la tasa turística en Barcelona. A continuación se apuntan las principales propuestas.

CiU: dedicar el impuesto por pernoctaciones parcialmente a financiar la promoción y el resto para compensar los efectos negativos causados por el turismo. El grupo municipal de CiU ha llegado a un acuerdo con la Generalitat para que Barcelona se quede el 48% del importe recaudado en la ciudad, en lugar del 34% actual.

Barcelona en Comú: dedicar el 100% de la recaudación del impuesto turístico en Barcelona a servicios para la ciudadanía, en lugar de financiar la promoción turística.

PSC: reclamar a la Generalitat que Barcelona se quede el 100% de la recaudación del impuesto turístico y que además la ciudad pueda fijar sus propias tasas.

PP: reclamar a la Generalitat el 100% del impuesto turístico.

ERC: pasar de la actual tarifa fija del impuesto a un porcentaje sobre la facturación, lo que permitirá aumentar los ingresos.

Un momento del debate organizado en ESADE por la Facultad de Turismo y Dirección Hotelera Sant Ignasi.

Cambiar la hoja de ruta

Por otra parte, la mayoría de los candidatos coincidieron en la necesidad de elaborar un Plan Estratégico de Turismo con modelos de gobernanza más participativos, que cuente con la inclusión de todos los agentes públicos, privados y vecinales.

Abriendo la mesa redonda, Sònia Recasens (CiU) afirmó que “estamos gestionando un caso de éxito” y defendió la existencia de un modelo de colaboración público-privado exitoso “donde ha habido un trabajo de promoción muy bien hecho”.

La candidata socialista Sara Jaurrieta afirmó, en cambio, que el turismo “es una fuente de riqueza pero, a raíz de las manifestaciones sin precedentes que hemos tenido en el último año, algo no se ha hecho bien”. También propuso la regulación de la economía colaborativa.

La candidata de Barcelona en Comú, Janet Sanz, indicó que el principal reto en cuanto a la gestión del turismo “es hacer compatible la ciudad turística con la ciudad de los barrios y optimizar el reparto de los beneficios que aporta la actividad turística. Barcelona es un patrimonio colectivo, y los vecinos y vecinas tienen que poder vivir en estos barrios”.

Oriol Illa, candidato por ERC, propuso "denunciar las prácticas ilegales y de intrusismo, que se tienen que atajar de forma urgente. No todo el mundo puede hacer de hotelero o de empresario si no tiene la capacidad y las licencias”.

Xavier Mulleras (PP) denunció la pasividad y la mala gestión del Ayuntamiento refiriéndose a las manifestaciones del año pasado en el barrio de la Barceloneta: “En agosto se hicieron 900 inspecciones en una semana, tantas como las que se hicieron en los últimos 7 años.”

Ver también Turismo: el tema estrella y más polémico de las elecciones en Barcelona así como Los cambios radicales del turismo en Barcelona si Ada Colau es la próxima alcaldesa.

Integrar a todos los actores

Por su parte, el decano de la Facultad de Turismo y Dirección Hotelera Sant Ignasi (Universitat Ramon Llull) Ricard Santomà, señaló que, desde una visión de turismo responsable, la relación entre el turista y el ciudadano tiene que ser “fructífera en la cual todo el mundo salga ganando”.

Las propuestas electorales de los partidos en materia de turismo para la ciudad de Barcelona pueden consultarse en un documento pdf (en catalán) elaborado por dicha facultad, y que se puede descargar al final de esta noticia.