El 14N, primera huelga general ibérica

Previamente los Comités Confederales de CCOO y UGT habían aprobado, también por unanimidad, la convocatoria del 14N, enmarcada en la jornada europea de protestas anunciada por la Confederación Europea de Sindicatos (CES), que incluirá manifestaciones y otras acciones en otros países de la UE.

En este sentido, el secretario de Comunicación de CCOO, Fernando Lezcano, confía en que esta jornada suponga un cambio “significativo” en la relación de poderes en la UE, al tiempo que ha destacado que supondrá un “salto espectacular” a nivel de coordinación sindical en el ámbito europeo.

Como ya han venido insistiendo las centrales sindicales, la finalidad de la que será la segunda huelga general en esta legislatura es revertir las políticas de austeridad de la UE, que después de dos años y medio están haciendo que “los países que las padecen estén peor que antes”.

“Hay más paro, se ha abandonado a nuestros jóvenes a su suerte, hay más pobreza, se reducen las prestaciones por desempleo y las ayudas a los más desfavorecidos, se desmantela la educación y la sanidad y no hay ninguna perspectiva de remontada económica. No podemos aguantar más, el fracaso de esas políticas está más que demostrado”, añadió.

Sin miedo al fracaso

La decisión, según ha asegurado el secretario de Comunicación de CCOO, ha sido “suficientemente ponderada”, por lo que no existe “miedo” a un posible fracaso de la convocatoria. “Si hacemos la huelga es porque no queda otro remedio, porque el Gobierno sigue erre que erre”, insiste. Por ello se ha mostrado seguro de que el seguimiento será “masivo”.

La huelga del 29 de marzo tuvo una mínima incidencia entre las agencias de viajes y un escaso seguimiento en hoteles y bares y restaurantes, según publicó HOSTELTUR noticias de turismo.

Coincide así con el secretario de Acción Sindical de UGT, Toni Ferrer, que cree que la huelga podrá con la resignación. Por ello ha pedido a los trabajadores que no tengan “miedo a perder un día de su salario” por secundarla, porque las políticas del Gobierno “de recorte y ajustes” provocarán que “no se pierda un día de salario, sino el salario completo”.

El Comité Confederal del sindicato, máximo órgano entre congresos, ha aprobado por unanimidad la convocatoria del 14N, con la idea de que esta movilización se convierta más en una protesta de toda la ciudadanía que de sólo una parte de ella, la de los asalariados.

UGT apuesta así por una huelga general en la que “no solamente los asalariados puedan expresar su rechazo a las políticas antisociales y exigir cambios”, sino que se convierta en “la huelga de los consumidores para expresar el rechazo social a las políticas de austeridad que están llevando a las economías europeas al suicidio”.

No obstante, el sindicato de funcionarios CSI-F y USO aún no se han manifestado, pendientes de las respectivas reuniones de sus órganos de decisión la próxima semana.

Convocatoria rechazada

La convocatoria ha recibido el rechazo del Gobierno y otros partidos políticos como UPyD, al igual que de los empresarios y autónomos, por considerar que el país no pasa por el mejor momento para sufrir una huelga.

En este sentido el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha asegurado en el marco del Consejo Europeo que la huelga general que los sindicatos tienen intención de convocar para el próximo 14 de noviembre "no ayuda en nada a España", porque no resolverá los problemas económicos y perjudicará la imagen del país.