Imserso: nueva muestra de ignorancia de la CNMC sobre las agencias

En pleno periodo estival, con las redacciones de los medios de información de vacaciones y cubiertas por voluntariosos becarios ansiosos de notas de prensa con que combatir la sequía informativa, la CNMC emitió un confuso comunicado que contenía imprecisiones y errores, difíciles de detectar por ajenos al sector.

La CNMC comunicaba que se proponía abrir un expediente sancionador a Viajes Halcón y Barceló por la gestión de los viajes del Imserso por posibles “efectos anticompetitivos”, y que ese comportamiento “podría haberse mantenido durante 20 años”, y se refiere a la sanción que impuso en 2000 a Viajes Iberia, Marsans y las dos mencionadas agencias.

Por un lado, resulta al menos chocante que si Competencia dice que las irregularidades se mantienen desde hace 20 años se haya esperando dos décadas para decirlo, máxime cuando hace 15 años que ya impuso una sanción. Por otro lado, en el comunicado se habla de una UTE como un tercer elemento, además de Halcón y Barceló, cuando en realidad esa unión temporal de empresas está integrada por las dos agencias, y en ningún momento se menciona su nombre, Mundosenior.

A toda esta confusión se añade una claro error cuando el comunicado de Competencia dice que Mundosocial (rebautizada hace años como Mundosenior) fue creada “en la temporada 1998/99”, cuando en realidad nació en 1991.

Por otro lado, da la casualidad de que el comunicado de la CNMC se produce el mismo día que Mundiplan (la UTE liderada por Iberia) anuncia que impugna el concurso ganado por Mundosenior. Y a esta coincidencia se añade otra -el mismo día 7 de agosto- de signo contrario que ha dejado pasmado a más de uno en el sector: La CNMC adjudica la gestión de sus viajes a Viajes Halcón, a la que por otro lado anuncia que va a expedientar….¿?

Sede de la CNMC.

Se trata de un cúmulo de imprecisiones, información confusa y algún error que, sin entrar en el fondo de la cuestión sobre si hay motivos o no para ese nuevo informe sancionador, denota una evidente ignorancia de la CNMC sobre la gestión de los viajes del Imserso y sobre el sector de agencias en general. Y no es el primer caso.

En este sentido, cabe recordar la millonaria sanción que Competencia impuso a las asociaciones de agencias de viajes por el caso del cobro de fees aéreos tras la desaparición de las comisiones. Una sanción que supuso la desaparición de FEAAV y AEDAVE. Aunque el caso que más evidencia el desconocimiento de Competencia fue la sanción a AMAVE, asociación de mayoristas, por cobrar fees aéreos al cliente. Algo que resulta imposible para un turoperador.

Otro ejemplo más es el del expediente sancionador que la CNMC tiene abierto a los grupos de gestión de agencias de viajes. La argumentación de este expediente pone en tela de juicio estrategias comerciales tan extendidas como el redireccionamiento de ventas y elección de proveedores, algo que no sólo hacen (o hacían) los grupos de gestión, sino que hacen (y siguen haciendo) las grandes redes de agencias sin que la CNMC lo cuestione. Una peculiar visión (o falta de visión) que lo que ayuda a hacer, más que defender la libre competencia, es favorecer el aumento de la concentración del negocio en manos de las grandes en detrimento de las pequeñas agencias y que va contra la esencia misma de los principios que debería defender la CNMC.

Está claro que el equipo de la CNMC está formado por profesionales en Competencia que materialmente no pueden tener un profundo conocimiento de todos los sectores que investigan, pero al menos deberían asegurarse el asesoramiento de expertos en cada actividad de cara a un mayor rigor en las decisiones a tomar, dada las graves consecuencias que acarrean.