Roma recupera la Fontana di Trevi, uno de sus monumentos más famosos
La masiva afluencia de turistas, la contaminación y las inclemencias meteorológicas habían causado importantes daños
Publicada 04/11/15La Fontana di Trevi ha vuelto a mostrarse en todo su esplendor después de permanecer casi 17 meses sin agua y envuelta en andamios. Los habitantes de Roma y los millones de visitantes que acuden a la capital italiana podrán volver a ver uno de los monumentos más admirados y representativos de la ciudad eterna.
La Fontana di Trevi se ha reinagurado tras las obras de restauración acometidas durante más de un año y medio. En el acto de reaperura, el superintendente romano Claudio Parisi Presicce y el presidente de la casa de moda Fendi, Pietro Beccari, lanzaron una moneda y a continuación el monumento se iluminó y el agua volvió a correr por su superficie acompañada del aplauso de la multitud de turistas que se congregaron en la zona.
En enero de 2013 la casa de moda anunció su decisión de financiar las obras de restauración de la "fontana", aquejada por el paso de los siglos, la masiva afluencia de turistas, la contaminación y las inclemencias meteorológicas.
De acuerdo al diagnóstico previo, los desperfectos se presentaban "en toda la superficie de la fuente, también sobre los yesos laterales de la fachada, que habían perdido su color original de falso (mármol) travertino".
Las piezas escultóricas y las rocas sobre las que se sitúan se encontraban en un particular mal estado, "recubiertas de espesas incrustaciones calcáreas", y algunas de las figuras mostraban grietas en la superficie.
Se ha limpiado la superficie del monumento, revisado y potenciado el sistema hídrico, se ha instalado una nueva iluminación led y se ha mejorado la red de cámaras de vigilancia.
Moda y patrimonio
Construida por Nicola Salvi entre 1732 y 1762, la Fontana di Trevi fascina al visitante por su magistral combinación entre escultura y arquitectura, ya que se encuentra integrada en la fachada del renacentista "Palazzo Poli".
Se ubica en el punto de llegada de uno de los acueductos de la antigua Roma, "Acqua Virgo", inaugurado el 19 a.C.
En 1732 el papa Clemente XII encargó a Salvi la construcción de la espectacular fachada del edificio y optó por proyectar un monumental conjunto escultórico dominado por la imponente representación de Océano.
El presidente y consejero delegado de la firma de moda Fendi se mostró"orgulloso" del resultado y anunció la financiación de otras cuatro obras de restauración en la capital: la Fuente de Moisés, el Ninfeo del Pincio, la fuente Perschiera y la monumental "Fontana dell'Acqua Paola" de la colina del Gianicolo.
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