Accidente de Spanair: el Tribunal Europeo de DDHH rechaza la demanda de los afectados

La propia asociación ha dado a conocer este miércoles la inadmisión de su denuncia, que fue acordada en el mes de septiembre, año y medio después de que la presentaran. No obstante, la resolución ha sido notificada ahora a la asociación de Afectados del JK5022, en una escueta resolución de un folio, fechada en diciembre, en el que se les comunica que la juez Kristina Pardalos considera que su demanda no cumple los criterios exigidos en los artículos 34 y 35 del Convenio Europeo de Derechos Humanos para que sea admitida.

Accidente de Spanair: el Tribunal de Estrasburgo rechaza demanda de los afectados

Esos artículos determinan que sólo se puede acudir al Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo tras agotar todas las vías posibles en la Justicia del país de origen de aquellos que solicitan su amparo (cosa que hizo la asociación del JK5022, tras fracasar su última demanda ante el Tribunal Constitucional)

Señalan asimismo que no se podrán admitir demandas que hayan sido presentadas ante otra instancia internacional, que sean iguales a otras ya resueltas por la Corte Europea, que resulten mal fundadas o abusivas, que no sean compatibles con el Convenio de Derechos Humanos o que respondan a casos en los que el demandante "no ha sufrido un perjuicio importante".

La notificación remitida por el Tribunal de Estrasburgo a los Afectados del JK5022 no precisa cuál de esos supuestos se aplica a su petición, pero sí subraya que su fallo es ya "definitivo" e inapelable y que no se le van a proporcionar más "precisiones complementarias sobre las deliberaciones del juez único".

Los afectados por accidente de Spanair recurrieron a Estrasburgo en marzo de 2014, una vez que el Tribunal Constitucional no aceptara tramitar su recurso contra la decisión de la Audiencia Provincial de Madrid de cerrar la causa abierta.

Los supervivientes del accidente y familiares de los fallecidos recurrieron a la Justicia europea al considerar que la española había vulnerado sus derechos, pero han admitido que si lo ocurrido en España fue "desesperante", lo ocurrido en el Tribunal Europeo de Derechos Humanos "no lo ha sido menos".

Según han explicado en un comunicado, era "la última puerta de un largo vía crucis que ha durado más de siete años" en el que no han cesado "de pelear por lograr justicia y verdad".

A su juicio, es "una burla intolerable" que el Tribunal Europeo de Derechos Humanos haya tardado 19 meses en rechazar la demanda y "ha colmado la paciencia, la frustración y el sentimiento de desamparo" que les ha acompañado desde 2008, pese a lo cual afirman que no se van a rendir.