Boeing recortará 4.000 puestos de trabajo

Según recoge ATW, el fabricante aeronáutico estadounidense señaló, no obstante, que estos recortes se llevarían a cabo dejando sin cubrir posiciones vacantes o acordando dimisiones voluntarias, y “por despidos únicamente como último recurso". La reducción de personal incluirá "cientos de ejecutivos y gerentes", según habría afirmado Boeing en un correo electrónico.

Boeing dijo que los recortes son parte de su plan general "para hacer cambios fundamentales a largo plazo con el objetivo de ganar en el mercado, financiar nuestro crecimiento y operar como un negocio saludable", añadiendo que "ello implica una combinación de ahorro de costes no laborales, ahorros en la cadena de suministro y niveles de personal reducidos”. Aclaró que no existe una meta de reducción de empleo, “mientras más podamos controlar los costes en su conjunto, menor será el impacto que habrá sobre el empleo”.

Línea de montaje del Boeing 777.

Boeing no especificó cuántas puestos adicionales podían ser cortados más allá de mediados de año si se considera necesario un mayor ahorro de costes.

Recortes de producción

El fabricante de flota había anunciado reducciones de las tasas de producción de sus modelos Boeing 777 y Boeing 747-8 (ver: Boeing reporta una caída de beneficios en 2015).

El denominado triple siete se construirá a un ritmo de siete aviones a partir de 2017, por debajo de las 8,3 unidades mensuales actuales; mientras que el índice del 747-8 pasará de 1,3 aviones por mes a sólo 0,5 mensual a partir de septiembre de este año, es decir, seis por año de casi 16 unidades.

Mientras que Boeing está aumentando la producción de su programa 737 -pasando de forma progresiva de las 42 unidades al mes en la actualidad a 47 a partir de 2017; a 52 a partir de 2018 y a 57 en 2019-, los aviones de fuselaje ancho cuya fabricación está recortando tienen un precio de alrededor de tres a cuatro veces más que los de fuselaje estrecho.

El fabricante de flota estadounidense ya había advertido a los inversores de que se preveía una caída de entregas de aviones e ingresos para este año con respecto al ejercicio anterior, aunque sería una situación temporal según el presidente y CEO de Boeing, Dennis Muilenburg.