El turismo rural pone en valor su oferta para el segmento MICE

Por autonomías, la Comunidad de Madrid es la más especializada, ya que el 42,7% de los propietarios rurales está preparado para albergar eventos de empresa en sus alojamientos. Los empresarios del País Vasco (38,8%), Galicia (31,3%), Murcia (29,7%) y la Comunidad Valenciana (29,4%) también ven en este nicho de mercado un gran potencial para sus casas rurales.

En cambio, al otro plato de la balanza, Asturias (16,7%), Islas Canarias (13,3%) e Islas Baleares (10%) son las comunidades autónomas en las que menos se arriesga a la hora de acometer esta especialización.

Los alojamientos rurales ofrecen la posibilidad de alquilar en exclusiva sus instalaciones. Foto: Mas Vinyoles (EscapadaRural).

Este crecimiento de la demanda se debe, en gran medida, a los beneficios que aporta realizar reuniones en un entorno rural. Además de proporcionar un ambiente que se desvincula de lo habitual, ofrece un espacio de trabajo enmarcado en la tranquilidad y el silencio, lo que estimula la concentración y la conexión entre empleados.

Instalaciones en exclusiva

Asimismo, estos espacios se preparan para ofrecer una exclusividad total a la empresa. Anna Cano, responsable de Comunicación de Rural Meeting, marca que aglutina establecimientos rurales que ofrecen espacios exclusivos para eventos corporativos y familiares, señala que “este hecho proporciona aún mayor libertad de expresión, asegurando los aspectos de confidencialidad y apertura total de mente”.

La organización de estos eventos en un espacio natural aporta la posibilidad de acompañar las reuniones con actividades de cohesión de equipos o de teambuilding para fortalecer lazos e incrementar la sensación de pertenencia a la compañía.

Si bien los establecimientos están dotados de todas los elementos necesarios para realizar una reunión de empresa exigente (como pantallas, proyectores, wifi, etc.), también es posible utilizarlos para actividades detox con el fin de desconectar de la tecnología, una tendencia al alza.

Estas se pueden combinar, además, con talleres de mindfulness, coaching, tai chi, yoga o meditación. De esta forma, concluye Cano, “las personas se pueden encontrar con ellas mismas e incrementar su bienestar interno, un estado que facilita las relaciones interpersonales”.