¿La Marca España necesita los toros?
Publicada 12/10/13
Análisis/ El toro de Osborne llegó a contar con más de 500 carteles gigantes repartidos por todo el país. Hoy sólo quedan 94 siluetas. Pero en la Región de Murcia, donde no queda ninguno, seis municipios han solicitado que vuelvan a instalarse estos carteles gigantes.
De este modo, una comisión técnica visitará los terrenos propuestos por los municipios de Murcia, Cartagena, La Unión, Blanca, Ulea y Las Torres de Cotillas.
El consejero de Presidencia de la Región de Murcia, Manuel Campos, mantuvo recientemente una reunión con el director de Comunicación del Grupo Osborne, Iván Llanza, para abordar el proyecto de colocación del toro de Osborne en esta comunidad.
Cabe recordar que el toro de Osborne nació como una enorme valla publicitaria hace más de medio siglo. Pero en 1988, al prohibirse cualquier publicidad fuera de los tramos urbanos visibles desde la carretera, se procedió a la retirada de estos elementos.
Sin embargo, en 1997, el Tribunal Supremo declaró el interés social, cultural y artístico del toro de Osborne y lo elevó a la categoría de símbolo nacional.
La figura del toro de Osborne tiene un peso de 4.000 kilos, mide 14 metros de altura y ocupa una superficie de 150 metros cuadrados.
Por otra parte, cabe recordar que las corridas de toros serán declaradas Patrimonio Cultural Inmaterial de España, según un proyecto de ley presentado por el Gobierno, no exento de polémica.
Lo cierto es que el mundo de los toros (sea el animal, las corridas o los toreros) no sólo forman parte de la Marca España, sino que se han convertido en uno de sus iconos visuales más poderosos.
Por ejemplo, en el siguiente video promocional de la ópera "Carmen" que se estrenó en Sidney el pasado mes de abril, podemos ver el toro de Osborne sobre el escenario.
Para bien y para mal. Del mismo modo que seis municipios murcianos quieren volver a tener el toro de Osborne como un elemento de su paisaje, este mismo símbolo fue utilizado en noviembre de 2008 por la revista británica The Economist en su demoledor reportaje sobre el inicio de la crisis de la economía española.
Sin embargo, cabe preguntarse si, entrados ya de pleno en el siglo XXI, el toro como icono visual de la marca España seguirá teniendo el mismo efecto que tuvo en el siglo XX, cuando nuestro país se abrió al turismo.
La imagen del toro tuvo muchísima fuerza a la hora de llamar la atención de los turistas europeos que comenzaron a llegar por millones a partir de la década de 1960.
¿Pero seguirá teniendo el toro la misma efectividad -como emblema de la marca España- entre los jóvenes viajeros europeos, americanos o los nuevos turistas que llegarán de los mercados emergentes de Asia?
Para comentar, así como para ver ciertos contenidos de Hosteltur, inicia sesión o crea tu cuenta
Inicia sesión