La parálisis política de España pasa factura al ocio y las vacaciones

Y es que según apunta Nielsen, "la confianza de los consumidores españoles sube, pero con matices".

Cabe recordar que el primer trimestre de 2016 se vio marcado por la celebración de elecciones generales el pasado 20 de marzo, comicios que se volverán a repetir el próximo 26 de junio debido a la falta de mayorías claras y de un acuerdo entre los partidos políticos para formar Gobierno.

Así, la confianza medida en términos globales registró un incremento de dos puntos en el primer trimestre del año con respecto a cómo terminó 2015, pasando de 72 a 74 puntos. "Sin embargo, los españoles se muestran cautos", dice la empresa de estudios de mercado.

Más tendencia a ahorrar

"En concreto, es muy significativo cómo aumentó en diez puntos el porcentaje de aquellas personas que tienden a ahorrar una vez cubiertos los gastos básicos del hogar. Así lo hace un 43% y es la principal medida que llevan a cabo los españoles con el dinero sobrante tras pagar hipoteca, facturas, etc".

Los españoles que dedican su presupuesto sobrante a "viajes y vacaciones" se mantienen en el 32%, sin cambios respecto al último trimestre de 2015.

Esta cautela se observa ya en algunos destinos turísticos como Benidorm.

Según apunta HOSBEC, la asociación hotelera de dicha localidad, "el mercado nacional ha acusado un frenazo en su tendencia creciente" y cae un 6% en pernoctaciones en la primera quincena de mayo.

Antonio Mayor, presidente de la entidad, comenta: "Esta temporada, que está llamada a ser histórica, puede verse frenada por el mercado nacional que está acusando la incertidumbre política que vivimos y que puede extenderse a los meses de verano si no se logra conformar un gobierno estable después de las próximas elecciones".

Empleo y economía, lo que más preocupa

Lo cierto es que para los españoles, las principales preocupaciones siguen siendo la seguridad laboral (33%) y la economía (31%), según Nielsen.

Además, dos de cada tres españoles tomaron medidas en sus hogares para ahorrar, siendo la factura energética y el ocio fuera del hogar donde más se intenta reducir el gasto, un 57% y un 56%, respectivamente.

"No obstante, cuando la situación económica mejore, serán muchos menos los consumidores que sigan conteniendo sus salidas, imponiéndose así el ADN social tan particular de los españoles, pues solo un 19% seguirá pasando más tiempo en casa. En cambio, un 42% continuará vigilando el recibo de luz y gas", explica Nielsen.

En cualquier caso, el comportamiento de los consumidores españoles ha sufrido una profunda transformación durante los últimos siete años como consecuencia de la crisis económica y en 2016 emerge un “consumidor bipolar”, con repercusiones para el sector turístico, según Nielsen.

Baja la confianza en Europa

España es el único país de las cinco grandes economías europeas donde creció la confianza del consumidor en el primer trimestre. En Francia se registró una caída de diez puntos en el primer trimestre del año. En el conjunto de Europa, el descenso fue de tres puntos.

Según el director general de Nielsen Iberia, Gustavo Núñez, “España parece una excepción en Europa, pero en plena situación de stand by político los españoles tienen mucho más claro el presente que el futuro".

En este sentido, añade, "aumentan los que consideran que ahora es un buen momento para comprar aquellas cosas que quieren o necesitan, pero al mismo tiempo empeora la percepción de que España está en recesión y de que saldrá de ella en los próximos doce meses”.

Acerca del informe

El informe internacional “Estudio Global de Confianza de los Consumidores” se realizó entre el 1 y el 23 de marzo de 2016 con la participación de más de 30.000 consumidores online de 63 países de Asia-Pacífico, Europa, América Latina, Oriente Medio, África y América del Norte.

Este informe se basa en el comportamiento de los consumidores con acceso a internet, aunque Nielsen utiliza un baremo mínimo de penetración de internet del 60% o de 10 millones de usuarios para su inclusión en la encuesta.