Fairmont quiere llevar sus hoteles de lujo a Madrid y Andalucía

Fairmont Hotels & Resorts cuenta en su catálogo con algunos de los hoteles de lujo más emblemáticos del mundo, como The Plaza en Nueva York o The Savoy en Londres.

Cabe recordar que Fairmont, junto con las enseñas Raffels y Swissôtel, ha sido adquirida por el grupo francés Accor, en una operación en la que Qatar Investment Authority (QIA) y Kingdom Holding Company (KHC) de Arabia Saudí se han convertido en los principales accionistas de la compañía gala, con el 10,5% y el 5,8% del capital.

Mientras, el Hotel Rey Juan Carlos I de Barcelona ha sido sometido a un proceso de reformas valorado en 37 millones de euros, con el fin de renovar y reposicionar un establecimiento que fue abierto para los Juegos Olímpicos de 1992 y que durante dos décadas fue gestionado por la cadena Husa.

El establecimiento, así como el anexo Palacio de Congresos de Cataluña, es propiedad de BCN Projects, empresa del príncipe saudí Turki Ben Naser.

"El príncipe le tiene mucho cariño a este hotel", dice el director general del hotel, Franck Sibille, que se incorporó al Fairmont Rey Juan Carlos I en mayo de 2015 para poner en marcha el primer proceso de renovación desde la inauguración del hotel en 1992.

La primera fase de reforma ha finalizado con la apertura del renovado lobby del hotel y 200 nuevas habitaciones. La inversión de 37 millones de euros ha sido aportada al 50% entre la compañía hotelera y BCN Projects.

Dos años de cambios

Se prevé que la renovación del hotel barcelonés culminará en 2017, incluyendo el rediseño del vestíbulo principal (obras ya finalizadas), las habitaciones y suites (la reforma integral se realiza por plantas, de modo que el hotel no se ha cerrado en ningún momento). Cuando se completen las obras, en total habrá 432 habitaciones.

"Los dos primeros años que llevamos en Barcelona nos han permitido situar el hotel al nivel de producto, servicio y lujo internacional que se espera de la cadena Fairmont. Esto ha implicado no sólo las obras de remodelación sino también formar al personal en nuevos procesos", explica Franck Sibille.

Durante las obras en el lobby, que duraron cinco meses, el acceso principal fue cerrado y los clientes tuvieron que entrar por una puerta lateral "pero conseguimos mantener la ocupación por encima del 60% y aumentar los ingresos en un 20%, así que estamos muy satisfechos", añade.

Preparados y listos para ampliar la cadena

"Ahora el hotel ya está de nuevo preparado para competir en el mercado de lujo internacional durante los próximos diez años", indica Sibille.

Y desde Barcelona, Fairmont comienza a atisbar nuevas oportunidades para expandirse en España. "Estamos mirando varias opciones... Tenemos ambición de desarrollo en Madrid y en Andalucía".

¿Por qué estas localizaciones? "Son los dos mercados que hoy por hoy pueden soportar el precio del lujo", explica Sibille.

Para expandirse en dichas regiones, Fairmont estudia desde hacerse con la gestión de establecimientos ya operativos, el alquiler o incluso desarrollar nuevos proyectos partiendo de cero. "Contemplamos todas las opciones".

Preguntado acerca de las tarifas en su hotel de Barcelona, el director del establecimiento explica que "mientras duraron las obras de reforma, el precio medio se situó en 180 euros. Ahora lo pasaremos a 225 euros y posteriormente a 270 euros".