El sector hotelero de Benidorm ha comenzado a palpar de primera mano los malos resultados que vienen sufriendo otros destinos turísticos desde que comenzó 2002. En los últimos doce meses la ciudad ha capeado el temporal con cifras de ocupación en torno al 80%. Noviembre ha roto con esta tendencia. Según los datos de la patronal Hosbec, la primera quincena arroja una caída de la ocupación del 15,1% y se sitúa en el 71,2 frente al 86,3 de 2001. Es la mayor del año y confirma que se trata del peor inicio de la temporada de invierno desde la última crisis de la década de los noventa.
El sector hotelero de Benidorm ha comenzado a palpar de primera mano los malos resultados que vienen sufriendo otros destinos turísticos desde que comenzó 2002. En los últimos doce meses la ciudad ha capeado el temporal con cifras de ocupación en torno al 80%. Noviembre ha roto con esta tendencia. Según los datos de la patronal Hosbec, la primera quincena arroja una caída de la ocupación del 15,1% y se sitúa en el 71,2 frente al 86,3 de 2001. Es la mayor del año y confirma que se trata del peor inicio de la temporada de invierno desde la última crisis de la década de los noventa.El presidente de Hosbec, Pere Joan Devesa reconoció ayer que por primera vez se ha producido un descenso real en el número de turistas que llegan a la ciudad. Devesa lo cifró en un 2%. El máximo responsable de la patronal hotelera dejó claro que los índices de ocupación no son equiparables a los de llegada de turistas. «Hay que tener en cuenta que el pasado año teníamos un 10% de plazas menos», señala. Este razonamiento lleva a Pere Joan Devesa a considerar que la bajada en el número de visitantes es del 2% mientras que el de la ocupación se cifra en un 15. Pero la apertura de nuevos hoteles no es la única causa. La recesión de la economía alemana y británica así como la debilidad de la libra frente al dólar son otras variables que hay que tener en cuenta, según se indica desde Hosbec. «Los datos son significativos pero no se trata de un descenso alarmante», indica Pere Joan Devesa.
En este inicio del mes de noviembre los hoteles de cuatro estrellas son los que se han llevado la peor parte. Su ocupación ha sido del 65,3% mientras que los de dos han alcanzado el 77% y los de tres un 74,6%. Los previsiones para el final de mes tampoco son buenas y apuntan a que los hoteles registrarán una media de turistas alojados en torno al 68,2%. Por procedencias, son de nuevo los clientes británicos los que sustentan el mercado de invierno al representar un 53,1% del total de turistas extranjeros alojados en establecimientos hoteleros. (A.V., diario Información, 20/11/02)
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