Palacios de congresos: el tamaño no importa

De parte de nuestros amigos los daneses, tengo una noticia inquietante para los concejales, alcaldes, diputados, directores generales y consejeros de turismo que en los últimos años han llenado España de enormes palacios de congresos y auditorios, compitiendo entre ellos a ver quién construía el centro más grande y más caro.

Resulta que los anabolizantes que hemos inyectado vía ladrillo y hormigón en nuestro turísmo de congresos y convenciones van a ser muy poco eficaces para satisfacer y captar la demanda del futuro.

Y es que, según apuntan las investigaciones sobre el turismo de reuniones que los daneses llevan desarrollando desde 2003, los factores determinantes que garantizarán la rentabilidad en este segmento tienen poco que ver con los metros cuadrados y mucho más con otros factores como: incentivación de la creatividad, redes sociales, diseño de espacios que favorecen la interacción, sostenibilidad, comida orgánica...

Les ofrezco algunos datos: el 60% de las habitaciones de hotel de Copenhaguen ya cuentan con ecocertificado oficial. Decenas de convenciones acuden a la capital danesa atraídos por los resultados que proporciona el concepto "Meetovation". Y los cocineros de la cadena Radisson han lanzado un producto estrella, "Brain Food", que asegura que los delegados asistirán a las reuniones cargados de energía en lugar de quedarse adormecidos tras una pesada comida.

En España somos líderes en turismo de ocio, sí. Pero el turismo de reuniones es otra liga y la demanda está cambiando muy rápidamente.