Los ocho retos más relevantes para el sector hotelero
Publicada 30/11/16
- El sector se enfrenta a un futuro lleno de incertidumbres, tanto nacionales como internacionales, aunque cuenta con la mejora de la eficiencia, calidad y competitividad como fortalezas
- Profundizar en el conocimiento del cliente y en las políticas de RSC como elementos diferenciadores son las armas para luchar con los destinos competidores
- El desarrollo de marca y la fidelización del cliente son muy relevantes para seguir atrayendo turistas a España
Cayetano Soler, socio responsable de Turismo, Transporte y Servicios de PwC, ha confirmado en la presentación de los resultados del Observatorio de la Industria Hotelera Española, que el sector “sigue en una espiral positiva, esencial para la economía española”. Prueba de ello, los hoteles batirán este año todos los récords en precios y rentabilidad, como ha publicado HOSTELTUR noticias de turismo.
Al sector sin embargo se le presentan algunas incertidumbres en el horizonte, tanto internacionales, lideradas por las consecuencias del Brexit y sus efectos en el tipo de cambio, así como el devenir de los pactos internacionales entre las principales potencias mundiales; como nacionales, entre las que se encuentran una posible ralentización de la demanda por una hipotética subida de precios, o la necesaria estabilidad de Gobierno con la aprobación de presupuestos, según ha constatado Soler.
Ante este panorama, en el que brillan “la mejora de la eficiencia, calidad y competitividad en la cadena de valor del turismo, integrada por trabajadores, empresarios y administraciones”, al sector se le presentan ocho retos relevantes que ha enumerado el socio de PwC:
1.- Mantener la estabilidad y la seguridad a nivel país.
2.- Afrontar a nivel regulatorio el crecimiento descontrolado de la economía sumergida.
3.- Incrementar el ingreso por turista, ya que el crecimiento tiene que venir por ahí porque ya estamos trabajando con volúmenes muy elevados.
4.- Las compañías deben centrarse en el desarrollo de marca, muy relevante para atraer más turistas, y en su fidelización.
5.- Invertir en tecnología para conocer mejor al cliente y dar respuesta a sus gustos y necesidades, área de desarrollo fundamental para mantener esa espiral positiva.
6.- Cuidar las estrategias de RSC (Responsabilidad Social Corporativa) para dotar a la oferta de mayor transparencia y cercanía al cliente, ya que éste exige un mayor nivel de compromiso en este sentido tanto a grandes como a pequeñas cadenas y establecimientos independientes.
7.- Afrontar el nuevo modelo inversor que separa la propiedad de la gestión. Es relevante a nivel país y empresarial para mantener la estabilidad.
8.- Luchar contra la estacionalidad, según ha apuntado el secretario general de CEHAT (Confederación Empresarial de Hoteles y Alojamientos Turísticos), Ramón Estalella, “creando y comercializando productos alternativos para repartir los flujos turísticos en invierno, sobre todo en las zonas turísticas más saturadas”.
De hecho, como ha indicado Soler, “las armas que tienen las cadenas para rivalizar con los destinos competidores cuando se recuperen es profundizar en el conocimiento del cliente y en las políticas de RSC como elementos diferenciadores; a los que se une la aplicación de tecnología para conseguir una oferta más completa e integral. Son las tres bases estratégicas para hacer que el turista siga eligiendo España, y por encima de todo ello la marca, cada vez más importante al ser relacionada con unos estándares de calidad determinados”.
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