Turismo joven: "El Millennial puede poner un destino de moda o arruinarlo”
Entrevista con, Peter Jordan, portavoz de la World Youth Student & Educacional Travel Confederation (WYSE)
Publicada 05/11/13Entrevista/ El turismo joven es uno de los segmentos que más rápido crece. Según la OMT, supone el 20% de las llegadas internacionales. El viaje ha adquirido una dimensión vital para este colectivo y lo consideran más como una parte esencial de su desarrollo personal que como una forma de ocio. La WYSE, la principal organización de turismo de jóvenes del mundo, publica la tercera edición de Nuevos horizontes, el mayor estudio del comportamiento del consumidor joven en cuanto a los viajes, que se realiza cada cinco años. Su portavoz, Peter Jordan, explica los resultados del informe en la revista HOSTELTUR del mes de noviembre.
Uno de los principales cambios que se aprecian entre los jóvenes viajeros es el uso masivo de las nuevas tecnologías, especialmente los dispositivos móviles para informarse, reservar y compartir sus experiencias, según concluye el estudio.
¿Cuáles son las principales conclusiones del encuentro de Sidney?
Hay muchos destinos interesados en trabajar con los Millennials, pero en realidad no están haciendo nada por atraerles. También se ha debatido sobre los visados, un tema especialmente importante. A modo de ejemplo, unos 350.000 jóvenes viajan cada año a Estados Unidos, si se les restringen estos permisos se generará un gran problema.
Según la nueva edición del informe Nuevos Horizontes, ¿cuáles son las principales características del consumidor joven o Millennial?
Una de las principales novedades es que ya no se puede perfilar como mochilero. En el estudio que hicimos en 2007, tres cuartas partes de las personas que contestaron a la encuesta afirmaron que el motivo de su viaje era el ocio o las vacaciones. Ahora son menos de la mitad los que responden a esta motivación, se aprecia un crecimiento entre los que viajan para estudiar un idioma, ganar experiencia laboral, estudiar en universidades extranjeras, hacer voluntariado o trabajar como au pair.
¿Y cuentan con suficiente presupuesto?
Existe la imagen de un joven con bajo presupuesto y escaso poder adquisitivo, por esta razón muchas veces no interesa a los destinos turísticos, pero ya no es mochilero ni de tan bajo presupuesto. En su viaje gastaron unos 2.800 euros de media, según los resultados de la encuesta. Sumando los gastos de vuelo, alojamiento y actividades realizadas, el resultado supone un incremento del 40% desde 2007.
Es un aumento muy importante…
El gasto en el turismo internacional ha crecido un 3%, según la OMT, mientras que en el turismo joven ha crecido un 9% al año. Los que más gastan son los que viajan por razones de estudios, incluyendo las tasas universitarias. Este tipo de viajero gasta una media de 3.640 euros y los que se desplazan para estudiar un idioma, 3.500 euros. A continuación se sitúan aquellos que podemos incluir en el concepto de nuevo mochilero, con mayor poder adquisitivo.
¿No es un gasto muy elevado para personas tan jóvenes?
Hemos preguntado sobre la procedencia del dinero, en algunos casos es fruto de un trabajo realizado antes de iniciar el viaje, en otros es una ayuda de sus padres. En el estudio no hemos preguntado por la situación personal del joven, sí por el motivo, y cuando obedece a razones de estudio implica un gasto importante.
Llama la atención ese elevado poder adquisitivo cuando en países como España existe una tasa de paro juvenil superior al 50%...
No es necesariamente el joven quien tiene en la cuenta el dinero para viajar. Si se trata de un viaje para estudiar, para aprender idiomas, son mucho más los recursos que vienen de los padres, que lo ven más como una inversión que como un gasto. Cuando son desplazamientos por razones de ocio, no sucede tanto esto. Ahora se gasta más en viajes, pero el dinero proviene de más fuentes.
¿Qué supone para ellos entonces el factor precio?
Para el 80% de los encuestados, el precio es el factor principal, el que va a decidir la reserva en el último minuto. A mucha distancia le sigue la posibilidad de reservar a través del móvil. Otros factores que han destacado en menor medida son el reconocimiento de una marca a la hora de comprar, la calidad del producto y su diversidad o la reputación de la agencia de viajes. También valoran la flexibilidad para cambiar los planes y la rapidez y eficacia del servicio.
¿Qué papel juega internet en este viajero?
Es una generación que está conectada permanentemente, en toda la cadena del viaje: planificación, reserva, realización del viaje… Se sacan la foto de la maleta y la distribuyen antes de irse al aeropuerto. Es un proceso continuo de compartir, de contrastar las experiencias entre los jóvenes y esto no va a cambiar, va a ir creciendo. Eso algo que tienen que tener en cuenta los proveedores, las autoridades turísticas, los que se dedican a la promoción y quienes no se hayan sumado todavía al mundo de las redes y del mundo online. Esta es una oportunidad muy importante para las agencias, los operadores están en contacto con el consumidor mientras éste está de viaje.
Una de las prácticas que definen a este viajero es su tendencia a compartirlo todo, ¿no?
Sí, incluso cuando les ha ido algo mal también. La gente quiere compartir el proceso de viaje y cuando recibe un mal servicio, no encuentra el alojamiento adecuado o existen ciertas carencias, también se comparte. El viajero joven es muy influyente en este sentido, puede poner un destino de moda o arruinarlo.
¿A qué destinos viajan principalmente?
Las ciudades más visitadas son Londres, Nueva York, París, Los Ángeles y Amsterdam. Y en cuanto a nuevas visitas, les gustaría viajar a Río de Janeiro, Tokio, Sidney, Buenos Aires y San Francisco. En Río de Janeiro influyen mucho los eventos que se van a celebrar, como la Copa del Mundo de Fútbol y los Juegos Olímpicos. En total tenemos una lista de 25 ciudades que están en el deseo del joven viajero, como destino o como lugar para viajar desde ahí al resto del país.
¿Cómo evolucionan los Millennial a medida que viajan?
A través del estudio hemos podido constatar que el viaje incrementa su interés por volver a salir y aumenta su interés por conocer otras culturas. Otra conclusión que extraen de sus desplazamientos es un mayor conocimiento y mayor seguridad en sí mismos. A continuación destaca una mayor tolerancia hacia las diferencias culturales. Es decir, una vez que el joven empieza a viajar, ya quiere viajar más.
¿Ha habido cambios en la franja de edad para valorar a este tipo de consumidor joven?
Sí, en el último estudio observamos que el rango de edad se está expandiendo mucho. El concepto del turismo joven ya es más un estilo de vida que la tendencia de un colectivo concreto. En un principio, este segmento contemplaba el grupo comprendido entre 18 y 24 años, coincidiendo con el periodo de estudios, pero en la última encuesta han participado gente más joven y cada vez mayor de 30 años. Hay personas de más de 30 años que se identifican como viajeros jóvenes.
¿Qué actividades hacen los Millennials en sus viajes?
Ir a cafés y restaurantes es la primera actividad porque hay que comer y beber, a continuación se situaba el shopping, pero ahora hay un cambio. Los deportes de aventura son un elemento cada vez más frecuente en los viajes de ocio, son más fáciles de reservar y compartir online. Además, la nueva generación de albergues se convierte en un destino en sí mismo. Organizan actividades para compartir, como cursos de cocina e incluso música. Son cada vez más centros sociales para los viajeros y la población local.
La versión completa de este reportaje ha sido publicada en la revista HOSTELTUR de noviembre y también se puede descargar como documento pdf a través del siguiente enlace: Millennials, el target de moda del turismo.
Para comentar, así como para ver ciertos contenidos de Hosteltur, inicia sesión o crea tu cuenta
Inicia sesiónEsta noticia no tiene comentarios.