La restauración respetuosa de una casa típica de pescadores del siglo XVIII y probablemente contemporánea a la construcción de la iglesia en época de Carlos III, con muros de piedra, ha dado lugar a la inauguración de un nuevo establecimiento hotelero en la conocida isla alicantina de Tabarca.
La restauración respetuosa de una casa típica de pescadores del siglo XVIII y probablemente contemporánea a la construcción de la iglesia en época de Carlos III, con muros de piedra, ha dado lugar a la inauguración de un nuevo establecimiento hotelero en la conocida isla alicantina de Tabarca. El establecimiento, de ambiente familiar, bautizado con el nombre de Casa La Trancada, dispone de cuatro habitaciones, y tiene capacidad para alojar a 12 personas. Tabarca, la única isla habitada de la Comunidad Valenciana, localizada a 11 millas de Alicante y tres del Cabo de Santa Pola, con una longitud de 1.800 metros y una anchura máxima de 400 metros, es un lugar especial. Indiscutible referente turístico de la costa valenciana, se ofrece al visitante como un refugio, ideal para una escapada de fin de semana de tranquilidad absoluta fuera de temporada estival, y con una riqueza paisajística, arquitectónica y natural ajena a los circuitos convencionales. Con una población estable, en invierno, de unas 30 personas, todas ellas vinculadas al turismo o a la pesca, con éste ya son tres los establecimientos hoteleros que integran su oferta, junto con el hotel Casa del Gobernador, con 14 habitaciones y 30 plazas, y el Hostal Masín. (HOSTELTUR)
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