Un total de 21 hoteles de la Costa del Sol han cerrado desde 1998 hasta 2003 sus puertas para acometer reformas, para lo que han invertido un total de 89,2 millones de euros, según un informe elaborado por la Secretaría Provincial de Comercio, Hostelería y Turismo de CC.OO. al que ha tenido acceso Europa Press.
Un total de 21 hoteles de la Costa del Sol han cerrado desde 1998 hasta 2003 sus puertas para acometer reformas, para lo que han invertido un total de 89,2 millones de euros, según un informe elaborado por la Secretaría Provincial de Comercio, Hostelería y Turismo de CC.OO. al que ha tenido acceso Europa Press. Estas reformas, que suelen acometerse coincidiendo con la temporada baja, recibieron una mayor inversión en el periodo 1998/1999, en el que siete establecimientos invirtieron 42,7 millones de euros en su renovación. Los hoteles Málaga Palacio, Amaragua, Beach Club, Guadalmina, Tryp Dinamar, Nautilus y Los Monteros fueron los que en ese periodo llevaron a cabo obras de remodelación. En la temporada 2000/2001 también siete establecimientos, que invirtieron 31,4 millones de euros, realizaron obras. El Parador de Nerja, el Pez Espada, Parasol, Angela, Mijas, Florida y Don Carlos fueron los hoteles que eligieron esos años para renovarse. Por último, en el periodo 2002/2003 cerrarán sus puertas los hoteles Belplaya, Costa Lago, Flamingo, Bali, Don Carlos y los apartamentos Hacienda Beach y Hapimag, este último realizará las obras entre 2003 y 2004. La inversión total en estos años para acometer reformas será de 15,1 millones de euros. De este modo, la media de inversión durante los cinco últimos años en remodelación de la planta ha sido de 18 millones de euros, según destaca el informe. El secretario provincial de Hostelería, Turismo y Comercio de CC.OO., Gonzalo Fuentes, destacó a Europa Press, que a pesar del esfuerzo inversor de los últimos años, "todavía existe alrededor de un 25 por ciento de plazas hoteleras cuyas instalaciones cuentan con un grado de obsolescencia muy alto". "Desde nuestro sindicato no cejamos en presionar sobre los empresarios, que aún no lo han hecho, para que presenten expedientes de suspensión por reformas y para que se invierta cada año parte de los beneficios en modernizar las instalaciones, que sería tanto como invertir en futuro", destacó Fuentes, quien también mostró la "preocupación" del sindicato ante algunos planes de inversión que contemplan en sus remodelaciones la ampliación de plazas hoteleras. Fuentes puso como ejemplo "el Ayuntamiento de Torremolinos, que bajo la batuta del Partido Popular, pretende añadir hasta un 20 por ciento de camas a las ya existentes, con lo que, a veces, las ampliaciones acaban sirviendo para robarle espacio a las infraestructuras de zona verde, piscina y aparcamiento". "Las subvenciones deberían dirigirse más hacia la remodelación global que hacia la creación de nuevas plazas que, en última instancia, repercuten negativamente en la masificación de la Costa y en la saturación infraestructural", aseguró. Fuentes recordó que a la Costa del Sol le afectó "más" la crisis de los años 1992 y 1993 que a otras zonas turísticas, entre otras razones, por la ausencia de infraestructura y por el mal estado de la planta hotelera, que ya había sido modernizada en otros destinos turísticos. De hecho, durante la crisis de los años 1992 y 1993 los hoteles que primero cerraron, "con la consiguiente pérdida de puestos de puestos de trabajo, fueron los hoteles cuyas instalaciones estaban más obsoletas". "Desde el año 1994 hasta hoy son muchos los hoteles y apartamentos de nuestra provincia en los que se ha invertido para modernizar las instalaciones e introducir las nuevas tecnologías que favorecen la racionalización del trabajo en la hostelería", explicó Fuentes, quien se congratuló de las empresas explotadoras se hayan "dado cuenta de la necesidad de invertir en las plantas hoteleras". Fuentes también se refirió a que desde CC.OO., a lo largo de estos años, se ha defendido los planes de viabilidad "serios y fiables, junto con planes de inversión para modernizar las instalaciones". En este sentido, uno de los "retos de la hostelería" es, precisamente, que los hoteles cierren en temporada baja para reformar sus instalaciones.
Para comentar, así como para ver ciertos contenidos de Hosteltur, inicia sesión o crea tu cuenta
Inicia sesiónEsta noticia no tiene comentarios.