El emisor balear no se recupera, dice AVA

Juan Pedro López, de Viatges Llevant considera que “existe una parálisis en el mercado. No existe el goteo de cara al verano de otras ocasiones. Tampoco existen muchas reservas –añade- para viajar a América o Asia y la gente viaja a destinos cercanos y baratos. Los cruceros sí son una opción para muchas personas porque existen ofertas muy interesantes”. López no considera la posibilidad de que “las ventas de último momento compensen” y considera que “posiblemente finalizado el verano, sea mejor temporada para las agencias puesto que los buenos datos de ocupación turística generarán un incremento de la capacidad de consumo de los ciudadanos en las Islas Baleares”.

Para Mateu Mairata, de la agencia Viajes Pollensa Balear, el verano nunca ha sido el mejor momento, sino que es durante los últimos meses del año, cuando los restaurantes y hoteles cierran la temporada, cuando se activa la venta de viajes y paquetes turísticos. En la misma línea se define Andreu Bennàssar, de Viatges Porto Cari de Felanitx: “al finalizar la temporada turística, cuando cierran hoteles y restaurantes empieza la nuestra”. Bennàssar afirma que “se venden muy bien los viajes a Menorca, Ibiza y Formentera, a la Península, los cruceros, capitales europeas…”

Viatges Almudaina, situada en Palma, también considera la temporada de verano “bastante floja y rara porque no es lo que había habido hasta ahora”. Su propietario José Luís Gimeno dice que “el 90 % quiere viajar cerca y gastar poco, también se da el caso de que una gran mayoría se informa en las agencia y después compra directamente por internet”. Gimeno también se suma a la tendencia de viajes cercanos y cruceros.

El presidente del grupo AVA, Ángel Martínez, defiende el papel de las agencias porque ofrecen seguridad y asesoramiento personalizado, así como un abanico de opciones y consejos profesionales de gente con más de 25 años de experiencia. El Grupo AVA está formado por 31 empresas con 57 puntos de venta en Mallorca, Menorca e Ibiza. Ocupa a más de 140 personas y facturó en 2010 unos 48 millones de euros.