La estrategia de Mallorca cuando se acabe el ciclo de vacas gordas

De momento, parece que la negociación con el Gobierno balear va bien...

Estamos intentando acercar posturas con el Govern balear sobre la parte más compleja, que es el tema económico. Tenemos un punto de partida, que es la primera propuesta económica de la anterior legislatura del PP, que sólo aceptó Ibiza. El nuevo gobierno balear, sin embargo, ha hecho una valoración económica más generosa respecto a la que se hizo en ese momento.

Y una vez el Consell de Mallorca reciba las competencias en promoción turística, ¿qué cambios más importantes veremos?

Lo importante es adaptar la estructura institucional a la realidad de mercado turístico. Cuando hablamos de posicionamiento turístico, todos tenemos muy claro que Mallorca, Ibiza, Menorca y Formentera son marcas claramente definidas en los mercados emisores, con su propia personalidad, virtudes y características.

¿Por lo tanto?

Desde este punto de vista, quienes pueden hacer mejor el trabajo de posicionamiento de marca, defensa e impulso de la marca y sus valores son cada una de las islas y sus respectivos Consells.

Cosme Bonet, consejero de Economía y Hacienda del Consell Insular de Mallorca.

¿Cómo repercutirá este cambio en Mallorca?

Queremos que la marca Mallorca se incorpore a la promoción que hacen los destinos de nuestra isla: Calvià, Alcúdia... Desde el Consell tenemos que procurar que esas marcas locales se engloben dentro de una marca más fuerte, más amplia, con más fuerza y más conocida como es la marca Mallorca.

¿Entiendo que al ganar peso la marca paraguas Mallorca deberá buscarse una mejor integración con las marcas locales de la propia isla?

Sí. Y al mismo tiempo también desarrollaremos un trabajo de producto, que tiene mucho que ver con una visión más global de la promoción económica. Con esto ya hemos tenido una coordinación excelente con la dirección actual de la Agencia de Turismo Balear. Se han creado unos clubes de producto donde coincidimos bastante en el objetivo.

¿Qué otras novedades destacaría?

La otra línea de colaboración institucional en la que hemos comenzado a trabajar es con Palma 365. Hasta el año pasado, el Ayuntamiento de Palma y el Consell de Mallorca habían colaborado poco en la promoción del principal destino urbano que tenemos en la isla.

En las negociaciones, parece que el Govern balear está dispuesto a traspasar a Mallorca un presupuesto anual de tres millones de euros para promoción turística y creación de producto. Con ese dinero ¿qué piensan hacer ustedes?

Queremos promocionar una Mallorca diferente al conocido producto de sol y playa. Por ejemplo, un producto muy interesante que comienza a tener mucho éxito es el turismo gastronómico y enoturismo. Aquí tenemos una oportunidad porque en Mallorca ya tenemos cocineros de más renombre y unas viñas que van creciendo y también muy bien valoradas a nivel internacional. Igualmente continuaremos promocionando otros productos más consolidados de temporada media-baja como el cicloturismo. La idea es seguir avanzando en la desestacionalización y sobre todo vincular nuestra marca con unos valores de calidad, no solamente relacionada con el sol y playa.

Pero el sol y playa aporta la mayoría de turistas...

Si queremos impulsar algún segmento específico de temporada alta, el que más nos interesa es el turismo familiar, de modo que pueda ir sustituyendo a otros segmentos, por ejemplo el de los jóvenes que se desmadran. Ahora mismo, por la coyuntura geopolítica, tenemos una oportunidad para poner en práctica ésta y otras medidas. Porque podemos escoger, dado que todo el mundo quiere venir a nuestras islas. Debemos tener claro que la actual época actual de vacas gordas acabará en algún momento. Y cuando tengamos que volver a competir con otros destinos como Turquía o Túnez -que cuentan con grandes instalaciones hoteleras- tenemos que estar preparados para no competir por precio como ocurría en el pasado.