Globalia pagó 40 M € en alquileres de Halcón y Ecuador

Desde que Globalia decidiera apostar por reducir el riesgo y basar la expansión de su red minorista (Halcón y Ecuador) en la franquicia, la factura de arrendamiento en alquileres de locales de agencias de viajes se ha reducido desde los 71 millones de euros de 2011, a los 40 millones de 2016. Y del cara a 2017, el objetivo es seguir apostando por esta fórmula, además de la figura de agencia asociada a través de la nueva marca Geomoon.

A lo largo de estos años, la factura de alquileres de locales de agencias ha ido cayendo desde los mencionados 71 millones de 2011 a los 55 millones de 2012, los 49,5 millones de 2013, 43,3 millones en 2014 y los 36,9 millones de 2015. En 2016 se ha visto incrementando ese capítulo de gasto un 8% respecto al año anterior, hasta los 40,16 millones de euros.

En estos años el modelo minorista de Globalia ha pasado de basarse en el de oficinas propias (especialmente en el caso de Halcón) al de franquicias. De hecho, actualmente en torno al 50% de las 900 agencias de la red de ventas de Globalia son franquiciadas.

En conjunto sumaron unas ventas de 1.204 millones de euros.

Esta reconversión de la agencia de viajes de Globalia tuvo su punto más traumático en 2013, que supuso el cierre de cerca de 160 puntos de venta y la salida de 450 trabajadores. “Gracias a estas duras y difíciles medidas el resultado de la división volvió a números positivos en 2014”, asegura la memoria económica de Globalia.

Precisamente es la división minorista la que está siendo objeto de una segunda reestructuración actualmente, de la mano del nuevo director general de Globalia, Pedro Serrahima, tal y como ha comunicado a la plantilla, asegurando que las previsiones son la de hacer crecer la red de agencias.

Por otro lado, cabe recordar, tal y como adelantaba en primicia HOSTELTUR, que el grupo Globalia ha logrado en el ejercicio económico de 2016 unos ingresos consolidados de 3.545 millones de euros, por encima de los 3.414 millones obtenidos en 2014. Ha alcanzado un Ebitda de 136,6 millones (140 en 2015) y un beneficio antes de impuestos de 54,4 millones frente a los 46,7 de 2015. El resultado neto después de impuesto arroja unas pérdidas de 17 millones de euros debido a la provisión de 65 millones realizada por los 200 millones que Venezuela tiene retenidos a Air Europa.