Tenerife marca tendencia

En el año 1992, cuando se crea Turismo de Tenerife ¿cuál debió ser la principal dificultad para la puesta en marcha de este organismo?

Creo que la principal dificultad fue, sobre todo, tomar la decisión que suponía pasar de un modelo que ya era de éxito -el Patronato de Turismo, que había sido de los primeros de España- a un modelo de concertación público-privada y que además funcionara como una empresa, a la que siempre se le supone más agilidad, dinamismo y capacidad de emprender.

Era un riesgo, vaya...

Creo que esas personas fueron adelantados a su tiempo, particularmente Adán Martín que con posterioridad sería el presidente del Gobierno de Canarias. Fue uno de los principales ideólogos.

¿Entonces el sector privado participó desde el minuto uno?

Exactamente, eso fue lo importante. Particularmente la patronal hotelera Ashotel, que participó con un 15% en el accionariado de la empresa y siguen siendo 25 años después vicepresidentes de Turismo de Tenerife, con voz y voto en la gestión mayoritariamente de recursos públicos, pero también aportando recursos privados a la actividad de la compañía.

¿Qué forma jurídica tiene hoy Turismo de Tenerife?

Con el paso del tiempo y debido a nuevas normas de la Administración nos vimos obligados a adquirir las acciones privadas de la compañía para que fuera 100% pública. Así que tuvimos que cambiar la participación en el accionariado, siendo en la actualidad 100% pública del Cabildo y ayuntamientos. Pero en el día a día, en la gestión y en el organigrama, la presencia de Ashotel y de la Cámara de Comercio como vicepresidentes de la empresa ha seguido igual.

Además, contamos con la figura del asociado: tenemos más de 500 empresas -pequeñas medianas y grandes- que pagan una cuota y reciben servicios a cambio. Gestionamos en torno a un millón de euros de empresas privadas que se han sumado a este proyecto de concertación público-privada.

Alberto Bernabé, consejero de Turismo del Cabildo de Tenerife.

Grandes empresarios de la industria turística española participarán en el evento conmemorativo de los 25 años de Turismo de Tenerife, el próximo 28 de septiembre ¿Cómo valora este hecho?

La presencia de grandes empresarios es un barómetro relevante. Porque además de intereses en Tenerife, tienen un trocito de su corazón también en la isla. Quizá porque somos un destino que empezó hace muchos años y que sigue dando alegrías y rendimientos a las empresas, pero también sigue generando buenas relaciones humanas.

En España contamos con una larga tradición en entidades de promoción de destinos turísticos ¿hacia dónde cree que deberían moverse estos organismos?

Nosotros hemos ido evolucionando hacia un modelo de gestión integral del destino. Ahí nos encontramos cómodos y es donde creemos que está el futuro. Los destinos no se gestionan solos, hace falta una entidad aglutinadora que ponga orden, concierto, concertación, rumbo, energía… En el caso de nuestra isla lo hace Turismo de Tenerife con dinamismo y eficiencia.

Creo que ése es el camino: profundizar que el sector se estructure lo máximo posible y que Turismo de Tenerife sea como ese aceite que hace que tantos engranajes del sector turístico no se bloqueen en ningún momento.

¿Por tanto, debe irse más allá de la promoción turística?

Es necesario participar no solo en la promoción sino en la creación de producto, la rentabilidad de la visita del turista, en la satisfacción del turista, generando innovación en el sector, liderando los procesos de cambio… En todo ese ámbito las empresas individuales tienen un papel protagonista y aunque los vientos ahora son favorables para la isla, Turismo de Tenerife aporta rumbo para llegar antes y más fuerte como destino. En ese mix de oportunidad es donde yo creo que situamos mejor a Turismo de Tenerife.