La Guardia Civil custodia el control del Aeropuerto de Barcelona-El Prat
Publicada 06/10/17
- El Gobierno central ha decidido mantener bajo vigilancia y control de la Guardia Civil las infraestructuras estratégicas de Cataluña
- El objetivo principal es la seguridad del centro de control y el aeropuerto dada su relevancia en la gestión del tráfico aéreo
- En principio el contigente trasladado a Cataluña permanecería hasta el 5 de octubre pero, dados los acontecimientos, su presencia ha sido prolongada
El contingente especial de guardias civiles, desplegado en las instalaciones del Aeropuerto de Barcelona-El Prat y en áreas del Puerto de Barcelona, con el objetivo de reforzar la seguridad durante los días previos y siguientes al referéndum independentista del 1 de octubre, mantiene el control de esas infraestructuras clave y estratégicas para el país tras los acontecimientos posteriores; según han confirmado a HOSTELTUR, noticias de turismo, fuentes cercanas a ese cuerpo de seguridad del Estado.
En tal sentido, el centro de control de Barcelona, la torre de control aéreo del aeropuerto, los accesos a esas áreas y los accesos a las instalaciones del aeropuerto permanecen fuertemente custodiadas por la Guardia Civil, ya que se trata del segundo aeropuerto español en tráfico mientras que el centro de control da servicio al espacio aéreo de toda la zona este y afecta a todas las aeronaves que
pasan por el espacio aéreo español, que son más del 50% de las que pasan por
el país.
El grupo efectivos fue trasladado a Cataluña, a finales del mes de septiembre y hasta el 5 de octubre, como parte de un dispositivo especial de seguridad por el clima sociopolítico en esa Comunidad Autónoma, con foco especial en Barcelona, y que, en vista de la evolución de los acontecimientos, el Gobierno central ha decidido extender el dispositivo hasta que haya un desenlace y se supere la actual situación.
Lo cierto es que esta ‘toma’ de las instalaciones aeroportuarias, especialmente de todas las áreas que tiene que ver con el control y la gestión del tráfico aéreo, y en el marco de la situación de incertidumbre y tensión que generan los acontecimientos políticos en Cataluña, mantiene bajo gran presión a la plantilla de controladores aéreos del Aeropuerto de Barcelona-El Prat.
La presencia de la Guardia Civil ya había sido reforzada en El Prat el pasado 12 de agosto, primero para reforzar la seguridad ante la huelga indefinida del personal de Eulen, encargada de la vigilancia en los puntos de control y, posteriormente, fue prolongada su presencia ante los atentados terroristas registrados a los pocos días en Barcelona y Cambrils el pasado 17 de agosto.
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