Cataluña pide el traspaso de siete Paradores antes de que Madrid los cierre

Cabe recordar que Paradores ha propuesto descartar cierres definitivos en la red, reducir a una media de tres meses los cierres temporales de 27 hoteles y rebajar el número de despidos a casi la mitad, de 644 a 350 bajas. Ver también Paradores propone descartar cierres definitivos y reducir a casi la mitad los despidos.

De momento, la Generalitat y los siete municipios donde se asientan los Paradores han creado un frente común para negociar con el Gobierno central.

La semana pasada, el consejero en funciones de Empresa, F.Xavier Mena, acompañado de la directora general de Turismo, Marián Muro, se reunió con los alcaldes de los ayuntamientos afectados.

"Las medidas previstas por la Administración del Estado en los Paradores situados en Cataluña no están justificadas econónicamente y afectan directamente a los puestos de trabajo y a la actividad turística y económica de los municipios afectados y a toda su área de influencia", según ha informado la Generalitat en un comunicado oficial.

Los representantes catalanes tienen previsto reunirse el próximo 28 de diciembre con la secretaria de Estado de Turismo, Isabel Borrego, para tratar sobre este asunto y proponer soluciones, "entre las que destaca nuevamente la petición de transferencia de estos equipamientos a Cataluña, que ya dispone de competencias exclusivas en materia de política y promoción turística", dice el gobierno catalán.

Así, la Generalitat y los municipios afectados definirán una "estrategia conjunta ante la decisión del Gobierno central de cerrar de manera parcial los Paradores de Seu d'Urgell, Cardona, Vielha, Aiguablava, Artíes y Vic-Sau".

"La red de Paradores de Turismo de España es deficitaria en el conjunto del Estado pero en el caso de los siete establecimientos ubicados en Cataluña el balance económico es positivo. El cierre durante determinadas temporadas de estos establecimientos afectará directamente sobre los puestos de trabajo y la actividad económica del territorio", afirma la Generalitat.

Según sostiene el gobierno catalán, "cerrar unos meses al año incide negativamente sobre uno de los pilares de la política turística catalana como es la desestacionalización. Además, algunos de los Paradores conforman una oferta de alojamiento esencial para la actividad económica del municipio, por lo que el cierre temporal afectaría muy negativamente al turismo de fin de semana o al de reuniones y convenciones".

Por todo ello, la Generalitat reclama la transferencia de estos equipamientos "porque desde la proximidad será más fácil asegurar, garantizar y consolidar su viabilidad".

Ante el proceso de reestructuración de Paradores, en otras comunidades también se están planteando medidas similares. Ver CCOO y UGT piden a la Junta la creación de una red andaluza de Paradores.