La pizza aspira a ampliar la lista italiana de Patrimonio Cultural

La gran expansión de la pizza por el mundo fue uno de los criterios que la comisión italiana para la Unesco tomó en consideración para aceptar su candidatura, que fue aprobada por unanimidad de todos sus miembros en marzo del pasado año. Previamente se había creado la Fundación Univerde, una asociación para promover dicha petición con el título 'El arte de la pizza napolitana', que destaca que el valor de este producto va más allá de su sabor, debido a su “función de rescate social, como elemento de identidad de un pueblo, no sólo de los napolitanos, sino de toda Italia”.

La pizza napolitana es la única variedad que cuenta con denominación de origen. Bajo la calificación de pizza napoletana verace artigianale ( pizza napolitana auténtica artesanal) está reconocida como producto agroalimentario tradicional italiano por la Unión Europea desde 2010.

Según datos recogidos en el libro "La pizza es alta cocina", escrito por Jesús Marquina, conocido como Marquinetti, cinco veces campeón del mundo en la elaboración de este plato, sólo en Italia hay 63.000 pizzerías que emplean 150.0000 personas y generan un beneficio anual de 10.000 millones de euros. Cada año se venden más de 5.000 millones de pizzas en el mundo, es decir, casi 14 millones de pizzas por día o 158 pizzas por segundo.

El maestro pizzaiolo Fabio Cristian, procedente de Nápoles, se desplazó a Madrid para participar en la II Semana de la Cocina Italiana en el Mundo y contar el arte de la pizza napolitana, acompañado por el cinco veces campeón del mundo en esta especialidad culinaria, Jesús Marquina. Foto©Pedro Grifols

En la recta final de esta carrera,la II Semana de la Cocina Italiana en el Mundo, que termina hoy organizada en Madrid por la Embajada de Italia, la Agencia Nacional Italiana para el Turismo (Enit) y la Cámara de Comercio Italiana para España, entre otras instituciones, ha girado este año en torno a la pizza con el fin de apoyar su candidatura.

El comité de la Unesco para la salvaguardia del patrimonio cultural inmaterial tomará una decisión en la reunión que celebrará en Seúl del 4 al 8 de diciembre.

La mayor concentración de patrimonio

De conseguir ese reconocimiento, la pizza reforzaría la presencia de Italia en las listas de la Unesco. Es el país con un mayor número de lugares considerados Patrimonio de la Humanidad, hasta un total de 53 lugares y monumentos, seguida de China y España.

Pero el patrimonio cultural no se limita a monumentos y colecciones de objetos, incluye también tradiciones heredadas de los antepasados que pueden ser carácter oral, rituales o incluso técnicas vinculadas a la artesanía tradicional, entre otras.

Con el distintivo de Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, la Unesco protege prácticas culturales y tradiciones que “ayudan a demostrar la diversidad del patrimonio y aumentan la conciencia de su importancia”. En nuetro país, el flamenco o la fiesta de la Mare de Déu de la Salut, en el municipio valenciano de Algemesí cuentan con ese reconocimiento, al igual que en Italia, la opera dei pupi -un teatro de marionetas de Sicilia- o la práctica tradicional del cultivo de la viña en vaso de la comunidad de Pantelleria.

El ENIT ha organizado recientemente en Madrid un workshop, en el que 36 empresas italianas mostraron su oferta a unos 200 compradores españoles y en el que se realizó una presentación de los 53 lugares Patrimonio de la Unesco en Italia.