Acuerdo entre Boeing y Embraer, nuevo rechazo de la justicia brasileña
Publicada 21/12/18
La Justicia Federal del estado brasileño de Sao Paulo volvió a dictar este jueves una medida cautelar que suspende de manera temporal el acuerdo entre el fabricante de aviones Embraer y el constructor aeronáutico estadounidense Boeing, cuyos términos finales fueron confirmaos esta semana, según informaron fuentes oficiales. El nuevo grupo, de capital cerrado, estará controlado en un 80% por el constructor estadounidense y manejará la división de aviación comercial y de servicios de Embraer, excluyendo las de defensa y la aviación ejecutiva, según el anuncio conjunto realizado en julio. La empresa brasileña se queda con el 20% restante que podrá vender a su socio en cualquier momento.
El juez Victorio Giuzio Neto, de un tribunal de Sao Paulo, aceptó la solicitud colectiva de sindicatos de trabajadores metalúrgicos de varias regiones de Brasil y suspendió cualquier "acto concreto" de una posible transferencia comercial de "parte de Embraer" a otra empresa, paralizando de momento la alianza que permitiría a Boeing hacerse con el fabricante aeronáutico brasileño hasta después de que Jair Bolsonaro, presidente electo de dicho país, asuma su cargo.
Según el acuerdo firmado entre ambos fabricantes de flota, Boeing tenía previsto asumir el control de las actividades civiles de Embraer, formando una empresa conjunta avaluada en 4.750 millones de dólares que le permitirá competir con el europeo Airbus en el segmento de aviones regionales.
"No visualiza el juicio cualquier amenaza o daño a la economía del país o situación provocadora de crisis en la medida que busca conservar una situación que se encuentra consolidada", afirmó el juez en su decisión, quien agregó que concede la cautelar en "carácter provisional" hasta que haya una "manifestación" por parte de la Unión Federal, de la Comisión de Valores Mobiliarios, de Boeing y Embraer.
Por su parte, el fabricante brasileño informó de que "tomará todas las medidas judiciales posibles para revertir la referida decisión".
Agregó que "la fusión está sujeta a la aprobación del Gbierno brasileño, tras la que las empresas deberán firmar el acuerdo".
Posteriormente, la "asociación estratégica" será sometida a la aprobación de los accionistas y de las autoridades reguladoras, así como a "otras condiciones pertinentes a la conclusión de una transacción de esta clase".
Esta es la segunda vez en menos de un mes que Giuzio dicta una cautelar para la suspensión de la fusión de las dos empresas. La decisión fue revocada cuatro días después por un tribunal de segunda instancia.
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