Derby factura un 2,6% más a pesar de la situación de Barcelona y Cataluña

¿Qué balance hace de estos 50 años?

Para mí es una historia de éxito. Estoy encantado. Son 50 años, prácticamente toda mi vida, que he invertido en esta empresa. He sido y soy inmensamente feliz porque hemos creado de la nada una cadena internacional con 23 hoteles, con presencia en Londres, París, Madrid y Barcelona. Seguimos con un volumen de crecimiento sostenido importante. Tenemos una auténtica colección de hoteles –de ahí el nombre de la cadena– porque cada edificio nuestro es singular, porque ha sido un palacio o una casa señorial del siglo pasado o del siglo XVII. Encima he compartido mi pasión, que es el arte, con mi negocio y por ello cada hotel es también un museo. He logrado combinar negocio y hobby y creo que muy pocas cosas más puedo pedir.

¿Y cómo ha sido este 2018?

Hemos cerrado el año con 78 millones de euros de facturación. Hemos crecido un 2,6%, a pesar de la situación de Barcelona y Cataluña, donde se ha registrado una reducción considerable del precio medio de la noche de hotel. Hemos crecido un poquito, pero hemos crecido.

¿No les ha afectado entonces la situación de Barcelona?

Sí que nos ha afectado en el precio medio, por la incertidumbre. Barcelona está teniendo una situación complicada, por los temas políticos y sociales. En Barcelona hemos registrado una caída de facturación, tanto nosotros como el resto. Barcelona ha perdido 10 euros de media en el precio de la noche de todos los hoteles de la ciudad. Esto es una burrada. A nosotros nos ha afectado porque tenemos 18 hoteles en Barcelona, pero como afortunadamente contamos con hoteles en Madrid, Londres y París hemos conseguido paliar esa caída.

¿Van a seguir apostando por hoteles urbanos en grandes capitales?

Sí. Seguimos con esa estrategia. El proyecto para 2019 es una gran inversión de 12 millones de euros para renovar nuestro hotel de Londres. Y nuestro crecimiento sigue a la expectativa de la búsqueda de ciudades de Europa para abrir un hotel en un edificio singular.

Jordi Clos dejará la presidencia del Gremi d’Hotels este año, después de 20 años en el cargo.

¿Cuál es la siguiente ciudad donde abrirán un hotel?

Tenemos abierto nuestro radar de búsqueda. Lisboa, Munich, Copenhague, Roma... Hay una serie de ciudades en las cuales si encontramos lo que buscamos nos estableceremos allí.

Parece que es muy exigente.

No. Pero como buscamos un palacio o un edificio señorial antiguo que pueda calificarse como establecimiento hotelero y con cierta capacidad, entendemos que no es fácil. Hemos visto muchos proyectos, pero no encontramos el que queremos. Pero no tenemos ninguna prisa. Lo que es seguro es que será en países europeos, pero no en España, donde ya tenemos en Madrid y Barcelona. Y para mi cartera de productos es mejor una capital europea que, por ejemplo, Valencia o Sevilla.

Además de hoteles, tienen edificios de apartamentos. ¿Está satisfecho con este otro modelo de negocio?

Sí. Nosotros tenemos edificios de apartamentos desde hace diez años, incluidos apartamentos de superlujo. Y nos funciona muy bien porque ofrecemos servicio de hotel, con la ventaja de que te hospedas en un apartamento con hasta dos habitaciones, salón y cocina. Para una familia que visita Barcelona es desde luego más cómodo que alojarse en una habitación de un hotel.

¿Y cómo prefieren crecer, con hoteles o apartamentos?

Depende del edificio que encontremos. El último que hemos visto, en Copenhague, aunque no hemos conseguido su transformación, en un principio iba a ser un edificio de apartamentos. Pero si vamos a empezar en una ciudad como Lisboa me gustaría que fuera un hotel. Aunque todo está abierto.

Jordi Clos, junto a su hijo Joaquim, delante del Hotel & Spa Claris de Barcelona.

Como presidente del Gremi d’Hotels ha sido muy crítico con la ordenación de la actividad hotelera y turística de la ciudad. ¿Cuál es la regulación que necesita Barcelona para tener un crecimiento ordenado y sostenible?

Para que tengas un crecimiento turístico ordenado y sostenible lo primero que necesitas es tener unos niveles de calidad adecuados. Si tu nivel de calidad no es el que corresponde, te llegará un turismo paralelo a tus exigencias. Barcelona ha sufrido un sarampión muy gordo con los apartamentos turísticos ilegales, con un nivel de calidad poco exigente, que han creado un problema importante de convivencia que ha vuelto a la gente en contra del turismo cuando tendrían que estar en contra de los que se comportan de manera vandálica con los vecinos. Esto crea una oferta de bajo nivel de calidad, que termina afectando a todo el negocio hotelero. Cuando digo que Barcelona ha perdido 10 euros de precio medio en 2018 es en toda la ciudad, desde los hoteles de una estrella hasta los de cinco. Por ejemplo, los hoteles de lujo en julio y agosto perdieron un 25% de facturación. Está pasando cosas que nunca habían sucedido, como el crecimiento de los robos o el fenómeno de los manteros. En 2017, Barcelona estaba en el quinto puesto en el ranking de las mejores ciudades del mundo y en 2018 hemos caído al puesto 13. Son indicadores que están ahí para el que los quiera ver. Yo no critico por criticar.

¿Por qué no va a continuar como presidente del Gremi?

No hay motivo ninguno. Tengo muchas presiones para que siga. Cogí un Gremi que estaba en una situación límite y 20 años después es una organización solvente. Somos el único gremio de Europa que es miembro de HOTREC. Nuestra organización es ejemplo y modelo en toda Europa. Creo que ya he hecho mi trabajo. Estoy orgulloso de ello, pero creo que es el momento de dar el relevo. Y así podré dedicar más tiempo a la cultura y a lo que más me entusiasma, que es mi ciudad.

¿Seguirá al frente de la empresa familiar?

Sí, aquí sigo, porque es mi trabajo y es donde disfruto, a pesar de tener a mis dos hijos trabajando en la compañía. Pero tengo muy claras mis funciones. El director general es Joaquim Clos y es él quien lleva el día a día de la empresa y Jorge es quien se responsabiliza toda la parte del diseño. Pero trabajo con ambos en el diseño y los asuntos importantes de la empresa. Lo que pasa es que de los 900 empleados que tenemos en plantilla no soy yo quien lleva la selección del personal ni quien está pendiente de los problemas diarios de la compañía.

Por último, Derby Hotels es una marca muy atractiva. ¿Ha recibido ofertas de compra?

Muchas, muchas. Cada mes recibimos al menos una propuesta de compra de alguno de nuestros hoteles. Ya sea de fondos iraquíes, de fondos de pensiones americanos y muchos más. Pero en fin, no tengo ningún interés en vender ninguno. Seguimos nuestro proceso de crecimiento. La familia, que son mis dos hijos, están encantados en la compañía y ojalá que llegara a mis nietos. Además, tenemos la ventaja de que somos una empresa muy solvente. Nuestro apalancamiento financiero no llega al 10%. Teniendo en cuenta que nuestro valor patrimonial es de unos 800 millones de euros, es algo insólito en el sector.

La entrevista a Jordi Clos se ha publicado en el último número de la revista HOSTELTUR, que puede descargarse en el siguiente enlace: