Retrasos del Aeropuerto de Brandenburg ponen en aprietos al alcalde de Berlín

Las tres formaciones de la oposición -Verdes, Izquierda y los Piratas- presentaron la moción, que será abordada en una sesión extraordinaria el próximo sábado, aunque no se espera que progrese, puesto que, hasta ahora, cuenta con el respaldo de sus socios de coalición, la Unión Cristianodemócrata (CDU) de Angela Merkel.

El nuevo retraso se debe a problemas técnicos calificados de "dramáticos" por el equipo técnico. Estos reveses también han sido un dolor de cabeza para las compañías aéreas alemanas. airberlin, en particular, que planea usar el nuevo aeropuerto como hub de su operación intercontinentales y su expansión en su nueva categoría de aerolínea de red, ha expresado que "el retraso en la apertura del nuevo aeropuerto de Berlín causará daños irreparables". Por su parte, Lufthansa tuvo que operar desde Tegel su el plan de crecimiento en Berlín, previsto desde las pistas de Brandenburg.

El portavoz gubernamental de la canciller, Steffen Seibert, expresó este miércoles el "malestar" de Merkel por la cuestión del aeropuerto, que además de pérdidas multimillonarios en las aerolíneas y locales comerciales que esperan poder operar desde ahí, daña la imagen de la capital alemana.

Wowereit anunció el lunes, además del retraso, que dejará su puesto en el consejo de vigilancia de la sociedad gestora del aeropuerto, en el que será sustituido por el mandatario del estado de Brandeburgo y correligionario, Matthias Platzeck.

Un técnico mejor que un político

El ministro de Finanzas de Merkel, Wolfgang Schäuble, pretende que el cargo no lo ocupe un político, sino un técnico, vista la caótica gestión de ese gran proyecto de la capital alemana.

Las obras del nuevo aeropuerto internacional se iniciaron en 2006. Inicialmente la inauguración fue fijada para noviembre de 2011 (ver: Posponen por tercera vez la inauguración del nuevo Aeropuerto de Berlin Brandenburg). El retraso inicial se atribuyó a la falta de los mostradores de facturación. Posteriormente, la inauguración oficial fue pospuesta para el 24 de mayo pasado y su puesta en marcha para el 3 de junio pasado. Sin embargo, el pasado 9 de mayo, por segunda vez, postergaron la apertura del nuevo aeropuerto de Berlín, retrasándose casi un año: hasta el 17 de marzo de 2013, que luego se extendió hasta octubre. Mientras, el presupuesto de la obra se ha disparado, en ese tiempo, de los cerca de 2.000 millones a unos 4.300 millones de euros.

Los retrasos han obligado a mantener en funcionamiento los dos viejos aeropuertos de la ciudad aún en activo -Tegel y Schönefeld-, bastante desfasados y funcionando al límite de su capacidad para absorber el tráfico aéreo a la capital alemana.