La Habana Vieja tendrá su tríada de lujo en su cumpleaños 500

Ambos hoteles vienen a ampliar las opciones de más alta gama en un área donde hoy reina en solitario el Hotel Gran Manzana Kempinski. Con apenas un año de explotación, el Gran Manzana es ya uno de los más demandados en la capital de Cuba y se ha convertido en referente regional tras ganar recientemente el Prix Versailles de Las Américas y un puesto en el certamen mundial de este prestigioso galardón.

A partir del próximo agosto el Grand Iberostar Packard añadirá 321 habitaciones al segmento de lujo. Situado en la misma ubicación de un predecesor de igual nombre, en la intersección del Paseo del Prado con la calle Cárcel, el nuevo edificio de diez niveles solo ha conservado sus fachadas centenarias, de las que ahora sobresale la moderna estructura de sus pisos superiores. Entre otras bondades, en el primer nivel tendrá salas polivalentes, piano bar, área de tiendas, cigar-bar, restaurant gourmet y un bar de tapas, así como un patio central climatizado con techo de cristal. Más arriba, en el quinto piso, estarán el Spa de múltiples servicios y la piscina.

A pocos metros y del lado opuesto del icónico paseo arbolado que conecta el Parque Central con el Malecón de La Habana, la refinada estructura del hotel Paseo del Prado simulará la proa de un barco con sus 10 niveles escalonados en 17, 24 y 36 metros, grandes fachadas encristaladas y un mirador con privilegiadas vistas en su piso superior.

A partir de su inauguración en julio del año próximo, la entrada al hotel de 250 habitaciones cinco estrellas plus se ubicará en la esquina de la calle San Lázaro y Prado. Tendrá en los bajos un corredor con galerías, un cigar-bar y una tienda por donde podrá transitar el público, y un área privada al costado derecho del edificio donde se ubicará la piscina. Dispondrá además de un parqueo semisoterrado con capacidad para 59 vehículos ligeros y 10 motocicletas protegido de inundaciones con una compuerta hermética.

Con el fin de asegurar su perdurabilidad, ambos inmuebles han sido erigidos con materiales resistentes al medio salino y a la fuerza de los vientos con otros valores añadidos desde el punto de vista ambiental.

Los hoteles Packard y Paseo del Prado tendrán el privilegio de ofrecer a sus clientes el monopolio de las mejores vistas de los recién restaurados entornos de la entrada a la Bahía de la Habana, del malecón, del Castillo de los Tres Reyes del Morro y de la fortaleza de San Salvador de la Punta y acceso inmediato a la intensa vida de la parte más antigua de la Ciudad Maravilla, Patrimonio de la Humanidad.

Las obras del Grand Hotel Iberostar Packard finalizarán el próximo mes de agosto

Redacción HOSTELTUR en La Habana, Cuba