La compañía aérea Delta Airlines registró una pérdida neta por valor de 1.204 millones de euros en el año 2002, frente a los 1.150 millones en pérdidas registradas en el año 2001, informó la compañía.
La compañía aérea Delta Airlines registró una pérdida neta por valor de 1.204 millones de euros en el año 2002, frente a los 1.150 millones en pérdidas registradas en el año 2001, informó la compañía. Estos resultados incluyen los costes extraordinarios, sin cuya contabilización la compañía registra una pérdida neta de 906 millones de euros en el conjunto de 2002. En cuanto a los ingresos operativos, éstos fueron de 12.586 millones de euros, mientras que en 2001 se elevaron a 13.129 millones. "Durante el pasado año, Delta, al igual que el resto de las aerolíneas, siguió sufriendo las consecuencias de la crisis registrada en la industria durante el período posterior al 11 de septiembre y de la desaceleración económica", declaró el presidente y consejero delegado de la aerolínea, Leo F. Mulin, a través de un comunicado. "Aunque las presiones y los cambios en nuestra industria van a continuar, Delta llevará a cabo los difíciles pero necesarios movimientos para posicionarse como una compañía líder cuando se recupere de estos tiempos inciertos", adelantó. En este sentido, la compañía explica en un comunicado que "las comparaciones anuales de resultados financieros y operativos "siguen estando significativamente afectadas por los atentados terroristas del 11 de septiembre". En cuanto a los resultados del último trimestre del pasado año, la pérdida neta ascendió a 343 millones de euros, incluyendo costes excepcionales, alrededor de la mitad que el último trimestre de 2001, período en el que la pérdida fue de 694 millones de euros. Excluyendo los elementos excepcionales, la pérdida neta en el cuarto trimestre fue de 217 millones de euros, contra una pérdida de 460 millones entre octubre y diciembre de 2001. La facturación en este período de 2002 se elevó a 3.130 millones de euros desde los 2.705 millones de 2001. En cuanto al año 2003, las previsiones de Delta no invitan al optimismo. De este modo, la directora financiera de la aerolínea, Michele Burn, aseguró que la compañía registrará pérdidas en el primer trimestre de 2003, "y probablemente en el conjunto del año", dado el débil comportamiento de la demanda y la competencia de las aerolíneas en el mercado estadounidense. La compañía está llevando a cabo duras reformas para recortar costes, entre ellas el despido de entre 7.000 y 8.000 trabajadores, ante la continua caída de la demanda de vuelos. "Las perspectivas continúan estando poco claras", añadió Burns en alusión a un posible conflicto contra Irak, así como a las bancarrotas de United Airliines y US Airways, que añaden más incertidumbre a la situación de la industria. Por último, y por medio de una conferencia telefónica, el número dos de la compañía, Fredrerick Reid, aseguró que la competencia de las aerolíneas de bajo coste está afectando a la demanda de Delta, aunque se está preparando para el lanzamiento de una filial de bajo coste.
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