Lloret de Mar anuncia un "punto de inflexión" en su política turística

"Lloret de Mar es uno de los principales destinos vacacionales europeos y está trabajando para cambiar el modelo turístico, diversificando la oferta y potenciando nuevos atractivos y productos", ha recordado el ayuntamiento a través de un comunicado, firmado por todos los partidos con representación municipal.

Ante los medios de comunicación, el alcalde, Romà Codina, afirmó que el ayuntamiento "no está en contra del ocio nocturno, presente en todo destino turístico, y en Lloret somos conscientes de que es un producto con un peso importante".

"Lo que no pensamos permitir es el modelo que sigue una parte del empresariado. Es insostenible e incompatible con el modelo de ciudad turística por la cual la mayoría de la población y el Ayuntamiento de Lloret apuestan", declaró el alcalde de la población.

En este sentido, el consistorio trabaja ya en el endurecimiento de los reglamentos y ordenanzas que afectan a diferentes Administraciones y actividades económicas, no exclusivamente del ocio nocturno.

Por ejemplo, el ayuntamiento quiere implantar la prohibición expresa de dormir en el coche dentro del casco urbano, tal como vienen haciendo en los últimos meses jóvenes procedentes del sur de Francia, que se desplazan a Lloret los fines de semana. También se pretende ampliar el número de cámaras de seguridad en las calles.

Lloret de Mar es el quinto destino de España por número de plazas hoteleras, con cerca de 30.000 camas. El año pasado, la localidad recibió 1,12 millones de turistas, que generaron 5,7 millones de pernoctaciones en establecimientos hoteleros.

Durante el mes de junio, el número de turistas creció un 23% mientras que las pernoctaciones aumentaron un 20,7%. La ocupación alcanzó el 79,1%, según Lloret Turisme y el Gremio de Hostalería.

Incidentes

El pasado lunes se registró en Lloret una pelea entre 400 jóvenes turistas franceses e italianos que se enfrentaron a la policía al cierre de las discotecas, que se saldó con un detenido francés de 23 años.

Durante la noche del miércoles al jueves hubo más disturbios frente a una discoteca, con 22 heridos leves. La policía detuvo 20 personas: 13 franceses, tres alemanes, dos holandeses, un suizo y un esloveno.

Además de dañar vehículos policiales, los gamberros quemaron varios contenedores, destrozaron macetas, vallas publicitarias y otro mobiliario urbano. Para dispersar a la multitud los antidisturbios dispararon salvas con las escopetas.